LIMA (AFP).- Apelaciones de última hora alargan la agonía política de la derechista Lourdes Flores, quien se resiste a aceptar lo que parece irreversible: su derrota ante el socialdemócrata Alan García, quien probablemente definirá en un próximo balotaje la presidencia de Perú con el nacionalista Ollanta Humala.

“Hemos presentado un recurso que nos parece de toda justicia ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE, máximo tribunal electoral), para que corrija los votos en aquellas actas o lugares donde nos parece que por error nuestros votos han sido asignados a otros candidatos”, dijo Flores.

Se trata de “una serie de recursos que creo que en los próximos días deben ser resueltos”, añadió la aspirante de la alianza conservadora Unidad Nacional, tras subrayar que mantiene su “optimismo” en pasar a la siguiente etapa electoral.

Las apelaciones fueron presentadas cuando se han contabilizado hasta el momento 99,25% de los votos emitidos por los peruanos en la primera ronda electoral del 9 de abril, quedando por escrutar 138.400 (0,75%). Estos sufragios están contenidos en 692 actas que son objeto de revisión por parte de las autoridades electorales debido a imperfecciones en su confección.

Por otra parte, la campaña de Lourdes Flores presenta impugnaciones ante el JNE sobre una cifra no precisada de votos.

Flores se mantuvo firme en negarse a aceptar una derrota electoral que reconocen amplios sectores, incluyendo personas de su entorno que han admitido que ya es una “derrota cantada”.