La forma en que las autoridades manejaron los cadáveres de las víctimas de Jimaní, al enterrar decenas de ellos en fosas comunes, además de deplorable, es algo que podría afectar el flujo de turistas al país, afirmó ayer el doctor Sergio Sarita Valdez, ex director del Instituto de Patología Forense.

Afirmó que la televisión mundial presentó la forma en que fueron sepultados cientos de cadáveres, directamente en el suelo, desnudos, sin cubrirlos siquiera con una funda plástica.

«Lo que estaba aconteciendo en Jimaní estaba siendo visto por millones de personas en Canadá, en Europa, Estados Unidos y muchos otros países, y eso debieron tomarlo en cuenta las autoridades que estaban manejando el desastre», expresó el médico.

Dijo que cualquier familia en Francia o Canadá que esté pensando venir de vacaciones al país observa la manera en que se manejaron los cadáveres en Jimaní podría decir: » vamos para cualquier otro sitio, menos a República Dominicana, porque si por casualidad se pierde uno de nosotros en una tormenta, un ciclón, un terremoto o una inundación en ese sitio, qué garantía tenemos de que nuestros restos van a ser apropiadamente identificados y regresados a nuestro país».

Al comparecer al programa Entrevista en TV, que produce el periodista Félix Gómez, por el canal 15, Sarita Valdez subrayó que el manejo de los restos de una persona reviste particular importancia para la familia.

Dijo que el Ejército estadounidense observa siempre una gran solemnidad para enterrar uno de sus miembros que se pierde en la guerra en cualquier parte del mundo.

Citó, además, el caso de la tragedia del once de septiembre del 2002 en Nueva York, luego de la cual tardaron meses recogiendo muestras por separado, haciendo pruebas de ADN (ácido desoxirribonucleico) para que cada familia recibiera a su deudo.

«Eso es tan dignificante, se llena un espacio tan grande, que el mundo lo ve con buenos ojos. Pero si observa lo que ocurrió acá la gente huye del país, no quiere venir acá y eso nos perjudica, y la columna vertebral de la economía es el turismo,» dijo.

[b]EL TIEMPO DIRÁ[/b]

Sarita Valdez dijo que sólo el tiempo podrá decir las consecuencias en términos económicos representará para el país el mal manejo de los cadáveres de las víctimas de Jimaní.

Sostuvo que en el caso de Jimaní faltó orientación forense y que tan pronto se enteró de la tragedia se ofreció al gobierno para colaborar en la tarea de rescate e identificación de los cadáveres, pero nadie lo llamó, «hubo una sordera estatal, porque estaban en cualquier cosa, menos en lo que debían estar».

Advirtió Sarita Valdez que debido a que no hubo un registro adecuado de las víctimas, ahora cualquiera puede afirmar que se le murió un familiar y habría que tomar de buena fe su testimonio.

«Habrá que aceptarlo como bueno y válido, porque usted no sabe si eso es verdad o no», dijo Valdez.

[b]DEPLORA PROYECTO[/b]

El forense deploró la propuesta del diputado perredeísta por San Cristóbal, Leivin Guerrero, en el sentido de que se apruebe por ley declarar muerta a toda persona desaparecida en una tragedia como esa, si existe la constancia de tres personas conocidas en el lugar de la desaparición.

Dijo que cuando una persona desaparece, aún cuando se dé por muerto, mientras los familiares no ven el cadáver mantienen la esperanza de que no se ha muerto y que va a reaparecer.

Indicó que una ley de esa naturaleza podría tener resultados adversos hasta de orden socio-político.

De aprobarse una ley así, advierte el médico, en caso de un secuestro y desaparición de una persona, bastaría conque tres personas se pongan de acuerdo para declarar a alguien muerto.

Dijo que la manera en que se ha querido enmendar el error cometido con los desaparecidos y los muertos de Jimaní, con propuestas como las del diputado sancristobalense, podría empeorar el asunto.