El pasado sábado se llevando a cabo en San Cristóbal el Foro de Redes Comunitarias, actividad con la que finaliza el circulo que inició en abril en Azua y Barahona, y que tiene por objetivo compartir experiencias en gestión de riesgos y fortalecer la resiliencia ante desastres de las comunidades, en el marco del proyecto Ponte Alerta Caribe: Armonizando herramientas y estrategias de gestión de riesgos con un enfoque inclusive en el Caribe, que se implementa con fondos de la Unión Europea.
La finalidad de esta actividad es revisar y actualizar los planes de trabajo y de emergencia de las redes comunitarias de cara a la próxima temporada ciclónica que inicia el 1ro de junio de cada año; así como fortalecer las capacidades de los miembros de las redes en medidas de protección humanitaria ante situaciones de emergencia.
De esta actividad se espera poner al día el estatus de las redes comunitarias de ambas provincias, capacitando a sus integrantes en prevención, mitigación y respuesta ante emergencias, así como actualizar los Planes Comunitarios de Contingencia, que indican los protocolos de respuesta a nivel local.
Para la obtención de estos resultados, se estarán realizando actividades participativas e integradoras, que motivarán a los y las participantes a plasmar sus ideas y alternativas en un plan de trabajo, y además, servirán para empoderarlos y empoderarlas en la respuesta a situaciones de emergencia ante cualquier evento natural.
El fortalecimiento de estas redes es elemental para la gestión de riesgos a nivel nacional, ya que ellas son las primeras en responder en tiempos de emergencias y las que mejor conocen las necesidades y capacidades de las comunidades.
El proyecto Ponte Alerta Caribe, que es ejecutado por el consorcio de organizaciones Oxfam- Plan International- Hábitat por la Humanidad- Humanity&Inclusion, con financiamiento de la Unión Europea, realiza esta actividad bajo el amparo de la ley 142-02 que define la gestión de riesgos como el planeamiento y aplicación de medidas orientadas a impedir o reducir los efectos adversos de eventos peligrosos sobre la población, los bienes, servicios y el medio ambiente; por lo que se considera la gestión de riesgos como un conjunto de actividades que de manera constante y cíclica contribuyen a disminuir la vulnerabilidad a las amenazas o peligros y a aumentar la capacidad para evitarlos, enfrentarlos y recuperarse de sus efectos de manera sostenible.