Buenos Aires.- Consolidar la gobernabilidad y dar respuesta a la inestabilidad social y a las demandas de la clase media son los grandes desafíos de la región, según expertos que participan en el Foro Económico Mundial para América Latina que comenzó este jueves en Buenos Aires.
«América Latina ha sido exitosa en sacar a decenas de miles de personas de la pobreza y ha crecido la clase media (…) Las demandas que enfrentan los gobiernos son de la clase media, las políticas van a tener que responder necesariamente a la clase media», afirmó Felipe Larraín, director del Centro Latinoamericano para Políticas Económicas y Sociales de Chile.
Los participantes coincidieron en que entre 2002 y 2012 el alza de precios de las materias primas se tradujo en crecimiento para la región. Pero luego la economía de América Latina se resintió con la crisis mundial, por la desaceleración de China y la contracción de Europa y Estados Unidos.
«Hay un reconocimiento de que en esa década América Latina avanzó, hubo reducción de pobreza y expansión de la clase media», dijo a la AFP Leonel Fernández, expresidente de República Dominicana y titular de la Fundacón Global Democracia y Desarrollo (Funglode).
Pero la clave, según Fernández, era conseguir que esos logros fuesen sostenibles en el tiempo «y la respuesta es que no, porque tuvo que ver con una situación global», dijo.
El panel sobre los desafíos de América Latina abrió el Foro Económico Mundial, inaugurado por el presidente argentino Mauricio Macri, con un millar de participantes de 65 países.
Daniel Zovatto, director regional del Instituto Internacional para la Democracia y Asistencia Electoral de Chile, enumeró tres claros riesgos en la región: fallas de gobernabilidad, inestabilidad social y el deterioro y precariedad del empleo.
Según el analista la región «está enfrentando un choque entre expectativas y realidades tras seis años de desaceleración económica».
«La desigualdad que se había reducido un poco vuelve a aumentar», afirmó, al señalar que de unos 60 millones de personas que salieron de la pobreza en América Latina hasta 2012, siete millones está volviendo.
«La desaceleración económica es una variable, pone fin a este proceso muy importante de movilidad social y lo social dispara el malestar con la política, con la economía.
Ya no hay tanto consumo, (hay) miedo a perder el empleo, a eso se suman la corrupción y la inseguridad, y se genera la crisis de gobernabilidad», sostuvo Zovatto.