Fotos de Saddam avivan polémica

Fotos de Saddam avivan polémica

BAGDAD (EFE).- Protestas contra EEUU y contra la supuesta represión de la Policía a clérigos suníes marcaron ayer la jornada en Irak, junto a los habituales atentados, que este viernes costaron la vida a casi una decena de personas.

Pero la actualidad del día se desplazó al Reino Unido, donde un conocido diario publicó unas polémicas fotografías del ex presidente iraquí Sadam Husein tomadas en su celda en ropa interior.

Pocas horas después de que dieran la vuelta al mundo, el mando militar estadounidense anunció que ha abierto una investigación para descubrir quién filtró las imágenes, descritas como ultrajantes por los abogados del dictador.

En declaraciones a la cadena de televisión por satélite qatarí «Al-Yazira», el letrado Ziad Jasawneh advirtió que exigirán explicaciones y responsabilidades ya que «es evidente que las fotos fueron tomadas en el interior de su celda».

«Consideramos que esto es un nuevo Abu Ghraib y exige adoptar medidas legales que ya hemos emprendido», agregó, sin dar más detalles.

El abogado se refería a la cárcel de Abu Ghraib, famosa por ser escenarios de las torturas de EEUU a presos iraquíes.

Las polémicas imágenes del dictador, supuestamente aislado en un celda de máxima seguridad, aparecieron en primera página del diario británico «The Sun».

En sus páginas interiores, el rotativo asegura que fuentes del propio Ejército estadounidense tomaron las fotografías en una presunta operación psicológica destinada a desmoralizar a la insurgencia que ensangrenta el país.

«Las fuerzas multinacionales en Irak están decepcionas por la posibilidad de que algún responsable de la seguridad y el cuidado del detenido Sadam Husein haya podido tomar esas fotos y hacerlas públicas. Se ha iniciado la investigación», asegura en un escueto comunicado.

Horas antes, dos soldados estadounidenses morían en sendas operaciones de los insurgentes en la convulsa provincia de Al-Anbar, corazón de la insurgencia en Irak.

Con su muerte, ascendía a cinco el número de uniformados de EEUU que han perecido en combate en territorio iraquí en las últimas 24 horas.

Además, al menos cinco iraquíes perdían la vida hoy en Bagdad a causa de dos atentados con coche bomba perpetrados contra objetivos chiíes.

Poco antes de la madrugada, un vehículo cargado de explosivos estallaba frente a la mezquita del Mahdi, en el suburbio bagdadí de Sidia y mataba a dos empleados.

Poco después del medio día, tres soldados iraquíes murieron y cinco más resultaron heridos al estallar un coche bomba en barrio bagdadí de Kadamiya, que acoge una de las mezquitas más veneradas por los chiíes de todo el mundo.

En la cárcel de Abu Ghraib, cinco detenidos resultaron heridos, tres de ellos graves, al caer un cohete clase Katiusha, informó el mando militar estadounidense, que puntualizó que no hubo bajas entre los soldados de su país.

Los ataques contra objetivos chiíes coincidieron con una inédita jornada de protesta de la comunidad suní, que por primera vez en la historia del país, ordenó cerrar las mezquitas durante tres días para denunciar los presuntos asesinatos y torturas por parte de la Policía de clérigos suníes

La polémica decisión, que acarrea una enorme carga simbólica, atiza el conflicto sectario que enfrenta a la mayoritaria comunidad chií y a la minoritaria suní, y que podría abocar al país al abismo de una guerra civil.

«Mantendremos la mezquita cerrada tres días para mostrar nuestro descontento con las prácticas de los organismos de Seguridad. La gran tragedia es que estas atrocidades son practicadas por el Ministerio de Interior», dijo a EFE Hamid al-Zahabiya, recitador de la mezquita de Shuhada, ubicada en el barrio de al-Jadra, en el oeste de Bagdad.

Este viernes también supuso la reaparición en la escena pública del joven clérigo radical Muqtada al-Sadr, instigador el pasado agosto de una sangrienta insurrección contra EEUU en el sur de Irak.

Al-Sadr sacó a miles de partidarios a la calle para exigir la retirada militar de EEUU y bramar contra la profanación de El Corán en el centro de detención de Guantánamo, en la isla de Cuba.

Las manifestaciones fueron pacíficas en la mayoría de las ciudades, a excepción de Naseriya, donde ocho personas, cuatro de ellos policías, resultaron heridas en enfrentamientos entre las fuerzas de Seguridad y milicianos chiíes. EFE

Publicaciones Relacionadas