PARÍS. Francia destruyó este jueves tres toneladas de marfil decomisado, una medida sin precedentes en Europa que busca sensibilizar a la opinión pública para luchar contra el tráfico de ese material proveniente de elefantes africanos.
Los paquidermos están siendo masacrados a un ritmo inquietante por el marfil de sus colmillos, muy apreciado sobre todo en los voraces mercados asiáticos, especialmente China y Tailandia.
Unos 698 colmillos brutos o labrados (2,3 toneladas) y más de 15.000 objetos que pesaban en total 800 kilos (estatuillas, joyas, etc) fueron arrojados a una trituradora cerca de la Torre Eiffel y reducidos a polvo, que luego sería incinerado.
«Somos los primeros en Europa, es una señal muy fuerte del compromiso de Francia en el combate contra el comercio ilegal de especies amenazadas, junto a otros países como Estados Unidos, el Reino Unido, Alemania, China y varias naciones africanas», dijo en el lugar de la operación Nicolas Hulot, enviado especial del presidente francés François Hollande para la protección del planeta.