Al menos diez personas han muerto, entre ellas cinco niños de entre tres y quince años de edad, en el incendio de una vivienda ocurrido este madrugada en el este de Francia.

Además, según han informado las autoridades, otras catorce personas han resultado heridas, de ellas cuatro en estado crítico, así como dos bomberos en estado leve.

El incendio comenzó en la planta baja de la vivienda poco después de las 03.00 hora local (02.00 GMT) y se propagó rápidamente a los tres pisos superiores de un edificio de siete plantas en la localidad de Vaulx en Velin, en la periferia de la ciudad de Lyon.

El ministro francés del Interior, Gérald Darmanin, ha declarado a la prensa que ante la magnitud del fuego, se enviaron 170 bomberos que trabajaron en condiciones «extremadamente difíciles».

Por su parte. un testigo del incendio relató a la televisión BFM que consiguió llevar una escalera a la fachada del edificio por la que pudieron huir una veintena de personas.

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Un portavoz de los bomberos señaló al mismo canal que la propagación del fuego fue «extremadamente rápida» y recordó que en este tipo de incendios la propagación del humo por las escaleras hace «muy difícil» la evacuación.

Otro testigo apuntó como posibles culpables a ocupantes ilegales, que son comunes en las plantas bajas de los edificios en invierno en la zona.

Ambos relataron que se oían llantos de niños y voces de adultos gritando «salvad a mi hijos».

La investigación por el incendio contempla la pista criminal en Francia

La Fiscalía de Lyon (este de Francia) ya ha abierto una investigación por el incendio.

En un comunicado publicado este viernes, el Ministerio Público indica que los servicios de la dirección en la zona de la Policía Judicial se encargan de las pesquisas, que deberá determinar las circunstancias y las causas del incendio entre las que «no se descarta ninguna hipótesis, en particular la pista criminal».

La alcaldesa, la socialista Hélène Geoffroy ha asegurado desconocer los motivos del incendio.

Sin embargo, una televisión local ha mostrado las imágenes de algunos vecinos que increpaban a la regidora por no querer decir claramente que, a juicio de estos, había un problema con la acción de los supuestos narcotraficantes.

También en declaraciones al periódico regional Le Progrès, algunos habitantes de la ciudad de Francia acusaron a los camellos que supuestamente ocupaban y utilizaban para el trapicheo de drogas los bajos de este edificio de viviendas en Mas le Taureau, un barrio popular de la ciudad de Vauxl en Velin, de 50.000 habitantes situada a las afueras de Lyon.

Un vecino, que se identificó como Sami, se quejó de que, según su versión, los responsables quieran ocultar que el suceso «viene del punto de trapicheo en la planta baja. Ahí comenzó el incendio. He visto a niños saltar del balcón. Era horrible», ha relatado.

Otro vecino insistió en el mensaje de que ahora lo que hace falta es mostrar «solidaridad» con las familias de las víctimas ante un siniestro por el que «todos estamos afligidos».