Francia en la élite con un aval para clasificar (19)

Francia en la élite con un aval para clasificar (19)

POR MARIO ARVELO, HÉCTOR MOLINA Y ARTURO PEÑALÓ
Con una deslumbrante victoria en el partido final de la Copa Mundial que organizaron en su territorio hace ocho años, Francia se convirtió en un miembro distinguido de la élite del balompié. Los que visten de azul “y, por tanto, gustan de ser llamados Les Bleus” levantaron el trofeo tras vapulear a Brasil con un 3-0 en el inmenso Stade de France de lo suburbios parisinos, liderados por el habilidoso jugador de ascendencia argelina Zinedine Zidane, quien perforó la red verdeamarela con dos contundentes cabezazos y así terminar con las esperanzas de un Brasil que hubo de esperar otros cuatro años para alzar su quinta Copa del Mundo. Los galos de entonces, seleccionados por Aimé Jacques, conformaban un equipo de ensueño, y son precisamente los últimos coletazos de muchos miembros de aquella gran generación los que tocan las puertas de Alemania para buscar el bicampeonato.

Cofundadores de la FIFA en 1904, los franceses fueron elegidos para ser anfitriones de la tercera Copa del Mundo en 1938, justa en la que no aportaron grandes luces, quedando eliminados en cuartos de final por una Italia que, capitaneada por Giuseppe Meazza, terminaría levantando el trofeo. El balompié galo continuó avanzando hasta que en Suecia 1958 los azules conquistaron el tercer lugar, en gran medida gracias a la descomunal contribución del atacante Just Fontaine y del visionario Raymond Koppa. Goleador de instinto asesino dirigido contra los cancerberos contrarios, a los que vacunaba con descaro, Fontaine estableció una marca de 13 goles que no ha sido superada “ni siquiera amenazada” hasta la fecha.

Para los años ochenta la madurez del fútbol francés auguraba un triunfo mundialista. Por aquellos años surgió una escuadra de vasto poderío, comandada por el exquisito Michel Platini, quien dicho sea de paso y en su condición de asesor especial de la FIFA, brindó su decidido apoyo al proyecto de Tarjeta Roja cuando ésta era una de las pocas columnas especializadas en fútbol en República Dominicana. Pero el gran Platini, que tantas glorias acumuló con su club italiano, la Juventus turinesa, no pudo alzar el ansiado trofeo, y su país cayó derrotado ante Alemania en dos semifinales consecutivas: en España 1982 y en México 1986. El primero fue un partido cargado de dramatismo que se desarrolló en el Estadio Sánchez Pizjuán de Sevilla, y que concluyó 3-3 antes de que los germanos se impusiesen 5-4 en la tanda de penales; el segundo fue en el Estadio Jalisco de Guadalajara, donde Andreas Brehme y Rudi Völler sentenciaron el 2-0 a favor germano.

Luego de una final vertiginosa disputada en el estadio Feyenoord de Rótterdam, Francia prosiguió con su espectacular trayectoria mundialista, haciéndose con la Copa de Europa 2000, ganada tras forjar una histórica remontada a un miserable catenaccio urdido por sus eternos rivales transalpinos. Los galos, que empataron a un gol gracias a una inspiración cuasi-divina de Sylvain Wiltord (en el cuarto minuto del descuento), derrotaron finalmente a Italia con gol de oro de David Trézéguet.

Llegados a Corea y Japón 2002 con el inmejorable pedigrí de ser los defensores de la Copa del Mundo, los que tienen la estampa de un gallo en su uniforme no tenían presagio alguno de la avalancha que le deparaba el destino. Les Bleus no lograron marcar ni un solo tanto en el campeonato: un gol de Senegal en la primera fecha les dejó fríos, un empate a cero con Uruguay les puso al borde del abismo, y dos goles de Dinamarca les enterraron en la amargura. Dos años más tarde, en la Copa de Europa 2004, fueron igualmente humillados, recibiendo el boleto de vuelta a casa de manos de los griegos, los eventuales campeones, quienes dispusieron de Francia por 1-0 en un cotejo agónico.

La actual selección francesa se encuentra en medio de una complicada etapa de reconstrucción, encabezada por el Raymond Doménech. Luego del retiro de varios de sus estelares, los azules recibieron duras críticas tras varias actuaciones que dejaron mucho que desear en su grupo de eliminatorias, que sin embargo terminaron por dominar, imponiéndose a Suiza (que también logró visado para Alemania), Israel, Irlanda, Chipre e Islas Faroe. Es decir, un grupo de regalo que casi desaprovechan aunque terminaran invictos: ganaron cinco veces y empataron otras tantas, pero sus 20 puntos les dejaba a dos de helvéticos y judíos, y a tres de los celtas. Para obtener la visa germana, los de Doménech debieron salir en tromba al Estadio de Saint-Denis para golear 4-0 a un débil Chipre (que sólo obtuvo cuatro puntos en la liguilla, a costa de una victoria y un empate con Islas Faroe). Para convertir la certeza en ilusión, y ésta en pequeño milagro, los azules debieron llamar del retiro a Zidane, Liliam Thuram y Claude Makelele, quienes ya habían colgado su camiseta internacional.

Los del gallo y la estrella solitaria volverán, entonces, a tener a Zidane como referente, aunque sus modestas actuaciones durante la campaña con el Real Madrid (descontando por supuesto sus destellos de grandeza, que lamentablemente llegan cada vez más espaciados) permiten suponer que el calvo de mirada penetrante y piernas gráciles llegará a Alemania en plena decadencia como jugador. En el medio del campo le escoltarán un Makelele que ha tenido nueva vida futbolística con el Chelsea, así como otro veterano de las glorias de 1998, Patrick Vieira.

Por esos azares del destino, los azules volverán a vérselas con Suiza en la primera ronda del Mundial. Por las eliminatorias de la UEFA sabemos que cualquier cosa puede suceder: en la liguilla de clasificación los helvéticos empataron sin goles en Saint-Denis y volvieron a entablar, esta vez a una diana por bando, en Berna. A pesar de ello “al menos sobre el papel” los coreanos deberán acompañar a los galos a cuartos de final, pero ya sabemos por la primera ronda de hace cuatro años que en esto de las predicciones no hay nada escrito en piedra. Para cubrir la puerta estará un Fabien Barthez que sigue afeitándose la testa, y quien confiará en el incansable Thuram para que despeje las últimas pelotas junto a William Gallas, quienes probablemente contarán con la compañía de Willy Sagnol.

Para el medio del campo, los de Doménech se sentirán por última vez seguros con Vieria, Zidane y Makelele, a quienes quizás se añada Ludovic Giuly, quien está teniedo la campaña de su vida con el Barcelona. Para liquidar a los contrarios, la ofensiva de punta francesa “esto sí” no ha perdido potencia ni precisión: para marcar goles estarán disponibles Djibril Cissé, David Trezeguet y Sylvain Wiltord, uno de los cuales hará pareja con el único puntero que tiene titularidad segura: Thierry Henry.

La ficha

Clasificación FIFA: 7

Línea de apuestas y predicción: 1/14, cuartos de final.

Dirigente: Raymond Doménech.

Jugadores principales: Thierry Henry, Sylvain Wiltord, David Trezeguet, Patrick Viera, Liliam Thuram, Zinedine Zidane, Djibril Cissé, Fabien Barthez, Ludovic Giuly.

Federación: Fédération Française de Football (Federación Francesa de Fútbol).

Año de fundación de la federación: 1919

Año de afiliación a la FIFA: 1904

Participaciones en copas mundiales: once (1930, 1934, 1938, 1954, 1958, 1966, 1978, 1982, 1986, 1998, 2002).

Palmarés en copas mundiales: campeona del mundo en 1998.

Títulos y resultados importantes: dos veces campeones de la Copa de Europa (1984, 2000), tercer lugar en 1958 y 1986.

Clubes principales: Girondis Bordeaux, Olympique Marseille, Olympique Lyonanais, Monaco, Paris Saint-Germain, Lens.

Suiza

Los fanáticos de la ConfederaciónHelvética volverán a ver a su equipo en el ruedo planetario luego de haber faltadoa la Copa Mundial tanto de Francia 1998 como de Corea y Japón 2002. Aunque sufrió hasta el último instante en la repesca contra Turquía (luego del 2-0 inicial en Berna tuvo lugar un caótico encuentro que finalizó 4-2 en Estambul), el equipo del seleccionador Jacob Köbi Kuhn se clasificó, gracias a los goles marcados en campo contrario, para su primera fase final de la Copa Mundial de la FIFA desde que los montañeses tomaran parte en Estados Unidos 1994, cuando alcanzaron los octavos de final. Por cierto, que la crisis desatada por los disturbios que siguieron al partido de vuelta de las eliminatorias de la UEFA provocó la suspensión por media docena de partidos de Benjamin Huggel.

Cabe indicar que los suizos estarán observando con mucho detenimiento la organización de la cita mundialista de Alemania, pues desde ya están en franco proceso de preparar la Eurocopa de 2008 junto a sus vecinos de Austria. A pesar de los avances registrados, la liga local dista mucho de vestirse de etiqueta, y sólo el Grasshopper y, más recientemente, el Basilea, han adquirido cierta visibilidad internacional en un país donde los aficionados del fútbol están más pendientes a las ligas extranjeras que a la propia.

Al fútbol suizo de la posguerra se le dio una oportunidad ideal para brillar cuando se le concedió su petición de organizar la copa mundial de 1954. Ya en los torneos planetarios de 1934 y 1938 los de la Confederación alcanzaron los cuartos de final. Para 1954, dos victorias sobre Italia (incluyendo una histórica goleada 4-1) reportaron a los helvéticos un nuevo lugar entre los ocho mejores, donde a pesar de salir con una cómoda ventaja de tres goles ante Austria,terminaron perdiendo 5-7, luego de encajar nada menos que cinco goles en siete minutos, anulando la actuación heroica de Josef Huegi, quien vacunó tres veces a los austriacos. A pesar de todo, para aquella ocasión fueron remozados los estadios en toda la geografía suiza, lo que propició un impulso importante para el fútbol en ese país centroeuropeo.

No obstante la ausencia de una cultura popular por elfútbol como en muchos de sus vecinos, la tradición de Suiza como país neutral la ha hecho hogar oficial del balompié, del mismo modo que en su territorio se encuentra la sede del Comité Olímpico Internacional, así como numerosas agencias del sistema de Naciones Unidas. Las bellas colinas de Zurich alojan los cuarteles generales de la FIFA, mientras que en las orillas del lago Ginebra en Nyon se encuentra la casa de la Confederación de Europa, la UEFA.

Liderados por el jugador del Borussia Dortmund de la Bundesliga Stephane Chapuisat, y por Ciriaco Sforza, el conjunto helvecio “como fue adelantado arriba” consiguió el pase a octavos de final en su última incursión mundialista en Estados Unidos. En dicha fase del torneo el equipo suizo cayó derrotado por 3-0 ante una más experimentada España, terminando así con las esperanzas de este joven y talentoso combinado de continuar avanzando.

Los suizos, cuyo palmarés internacional se limita a la medalla de plata obtenida en los juegos de la Olimpíada correspondientes a 1924, mantuvieron una impresionante racha de catorce partidos sin perder, la cual se extendió por más de un año hasta que la repesca con los turcos vino a complicarlo todo. Este dato demuestra que la madurez como equipo viene consiguiéndose en una renovación profunda, en la cual el seleccionador ha tomado de las manos a un contingente de jóvenes talentosos entre quienes se encuentran Tranquillo Barnetta y Philippe Senderos, quienes ya causaron amplia sensación por su desempeño en las categorías juveniles.

El combinado de Kuhn cuenta en sus filas con un habilidoso capitán en la persona de Johann Vogel, además de una mezcla interesante de jugadores experimentados y, como ha quedado dicho, nuevos valores. Vogel, de 28 años, viene haciendo carrera con el AC Milan de la liga italiana, y su liderazgo en el onceno helvético se sustenta en la calidad de su juego y la presencia que su figura impone en la puesta en ejecución de los planteamientos tácticos del entrenador.

Además del veterano portero Pascal Zuberbühler y del centrocampista del Hamburgo Raphael Wicky, la plantilla suiza incluye a varios atletas con experiencia en el extranjero, como es el caso de Senderos, quien contribuye decisivamente a la defensa del Arsenal en la Liga Premier inglesa, o Barnetta, quien se destaca en Alemania con el Bayer Leverkusen. Para la cita germana, la defensa vendrá redondeada por Christoph Spycher, Philipp Degen y Patrick Muller, mientras las luchas del centro del campo vendrán planteadas por Wicky, Barnetta y Vogel, probablemente acompañados de Ricardo Cabañas, el suizo de ascendencia española que ya ha levantado tres veces la Copa de Liga en Helvecia.

En el ataque, para la escuadra del país donde se fabrican relojes y, aunque no se cultiva el cacao ni la caña de azúcar, tienen fama por la calidad de sus chocolates, no hay otro jugador de punta con el olfato de gol que el exquisito Alexander Frei, nacido el 15 de julio de 1979 en Basilea. Atacante estelar del Stade Rennais en la división de honor francesa, Frei es un perforador de pórticos inmanejable para cualquier defensor; con 22 goles en su cuenta personal la temporada pasada, cuando participó de 40 encuentros de liga, la voluntad anotadora de Frei es el orgullo de quienes siguen a la selección que viste de rojo y blanco.

Visto el calendario de juego en la liguilla mundialista, los hinchas de Suiza tienen derecho a soñar: las posibilidades de volver a amargar a los franceses está latente, y ciertamente los de la cruz blanca sobre fondo rojo podrían aspirar a que su nombre sea inscrito entre los dieciséis mejores del mundo luego de enfrentarse a togoleses y surcoreanos. Sin embargo, las efusivas muestras de alegría que siguieron a la clasificación “la furia del vuelco popular que siguió a las eliminatorias, que incluso involucraron a políticos de todo el espectro, no había sido nunca vista en un país flemático por excelencia” permiten indicar que los aficionados saben que encontrarse entre los 32 mejores es, de por sí, un triunfo neto. Los suizos podrían despedirse del Mundial en primera ronda, pero no por ello su fútbol habrá fracasado.

La ficha

Clasificación FIFA: 35

Línea de apuestas y predicción: 1/200, eliminada en primera ronda.

Dirigente: Jacob Köbi Kuhn

Jugadores principales: Johann Vogel, Pascal Zuberbühler, Raphael Wicky, Philippe Senderos, Tranquillo Barnetta, Benjamin Huggel, Alexander Frei, Christoph Spycher.

Federación: Schweizerischer Fussballverband / Association Suisse de Football / Associazione Svizzera di Calcio (Asociación Suiza de Fútbol, escrita en las tres lenguas oficiales de la Confederación Helvética, a saber, alemán, francés e italiano).

Año de fundación de la federación: 1895

Año de afiliación a la FIFA: 1904

Participaciones en copas mundiales: siete (1934, 1938, 1950,1954, 1962, 1966, 1994).

Palmarés en copas mundiales: llegaron tres veces a cuartos de final (1934, 1938, 1954).

Títulos y resultados importantes: medallista de plata olímpica (1924).

Clubes principales: Grasshopper Zurich, FC Zurich, Lausanne-Sports, Basilea, Xamax Neuchatel.

Japon

Luego de que el Mundial que organizaran junto a Corea del Sur hace cuatro años les abriera las puertas de su segunda participación en una fase final, los japoneses lograron clasificarse tras una exitosa marcha en las eliminatorias del continente asiático. En la primera liguilla en que tomaron parte concluyeron en primer lugar, sin empatar ni perder, arrollando a la India, Singapur y Omán con agregado de 16 goles a favor y sólo uno en contra. La siguiente ronda, que les valió la visa alemana, la despacharon con cinco victorias frente a Bahrein, Corea del Norte e Irán; sólo conocieron la derrota cuando cayeron 2-1 ante los persas en Teherán.

Con un fútbol bien organizado y la brillantez de ciertas individualidades, los azules se aprestan a demostrar que su clasificación directa hace cuatro años no fue un regalo. El entrenador de la selección es el brasileño Artur Antunes Coimbra “el gran Zico” que no pudo hacer realidad los sueños de sus compatriotas: que la verdeamarela levantara la Copa del Mundo teniendole como figura senera, cayendo sucesivamente en las ediciones de Argentina 1978, España 1982 y México 1986.

La mejor arma de los samuráis es un vigoroso centro del campo, comandado por el ya veterano de las divisiones de honor en Inglaterra e Italia Hidetoshi Nakata (actualmente con el Bolton Wanderers de la Liga Premier), de quien Maradona ha dicho que es el referente fundamental de calidad para el archipiélago nipón y, evidentemente, su líder natural. Por detrás estarán corriendo en ayuda del arquero Seigo Narazaki (quien ya defendió la puerta nipona en Francia 1998 y de nuevo hace cuatro años, y a quien Zico podría sentar para dar paso a un cancerbero más joven, que podría ser Yoshikatsu Kawaguchi) los defensores Yuji Nakazawa (columna infranqueable del Yokohama Marinos), Makoto Tanaka (del Jubilo Iwata) y el elegante capitán Tsuneyatsu Miyamoto.

Cabe señalar que la figura física de Miyamoto ha provocado serios problemas de seguridad, ya que una barra brava de miembros de su fans club le persigue para ver de cerca sus partidos con el Gamba Osaka y, con la camiseta azul y los pantalones blancos de la selección nacional, lo acosan en todos los rincones del mundo, varias chicas habiendo incluso logrado burlar a los guardaespaldas para penetrar hasta sus habitaciones privadas en los hoteles donde pernocta. Otro defensor que despierta pasiones fuera del campo, y que podría ver acción en lo que sería su segundo Mundial, es el zaguero de origen brasileño Alessandro Alex dos Santos. Dicho sea de paso, la vasta comunidad brasileña en el archipiélago ya había aportado dos jugadores del máximo nivel al seleccionado nacional que ostenta en su bandera un sol mañanero: Ruy Ramos y Wagner Lopes.

Redondean el equipo en el medio del terreno, primero, un gran entregado a la causa del balompié total: Shinji Ono, quien demostró su clase en tres sólidas temporadas en Países Bajos con el Feyenoord. Segundo, Shunsuke Nakamura, cuyo juego preciso ha obtenido encendidos elogios por parte de los cronistas que cubren las ligas italiana y escocesa. Tercero, Junichi Inamoto, quien se destacó con el Arsenal y el Fulham antes de partir a su tercer equipo del Premiership inglés, el West Bromwich Albion. En el centro del terreno, el entrenador de los nipones podrá también contar con atletas de calidad en Mitsuo Ogazawara y Takashi Fukunishi.

Los grandes problemas de Zico aparecen en la punta del esquema, que es precisamente donde los que visten de kimono encuentran sus debilidades fundamentales. Esta ausencia de ataque definidor probablemente les cueste el pase a las alturas de vértigo a la cual llevaron a su fanaticada en ocasión del Mundial de hace un cuatrienio. Un delantero que parece anclado en posición es Naohiro Takahara, de 25 años, quien tiene experiencia sudamericana con el Boca Juniors, equipo bonaerense con el cual militó tras concluir la primera etapa de su carrera como local con el Jubilo Iwata; posteriormente marchó a la Bundesliga, donde ha calentado el banco del Hamburgoer SV (cuyas graderías le han bautizado como el “Sushi Bomber”), aunque sigue contando con la confianza de Zico, que le utilizó a placer durante las eliminatorias asiáticas. Takahara, quien se perdió el Mundial pasado por lesión, Atsushi Yanagisawa, otro de sus favoritos y quien ha tenido más tiempo de juego en la delantera del Sampdoria y su actual equipo, el Messina de la Serie A italiana.

Pero como ninguno de los citados (Takahara y Yanagisawa) garantiza el poderío necesario para convertir ocasiones, Zico se verá forzado a medidas desesperadas “especialmente al inicio de la contienda, ya que para cuando les toque el tercer turno, frente a Brasil, todo estará escrito para los hijos del sol naciente” que podrían incluir el adelantar a Nakamura, encargándole la resolución frente a las porterías contrarias. Los delanteros Tatsuhiko Kubo, del Yokohama Marinos, y Masashi Oguro, quien milita en el Grenoble francés, podrían quedarse en la banca o, peor, en sus respectivas residencias.

Convocando al espíritu del inextinguible capitán Masami Ihara (quien jugó en 123 partidos como internacional, máximo total para un japonés) y al ejemplo definidor de Kunishige Makamoto, cuyos 73 goles siguen siendo “por cerca de medio siglo” el total superior de un rematador nipón, Zico pretende impulsar hacia octavos a un equipo cuyo coraje competitivo debería ser premiado con mejores resultados.

Ya se sabe que los hinchas japoneses son los más higiénicos de todo el orbe: dejaron boquiabiertos a los encargados de la limpieza de los estadios al terminar los partidos de Francia 1998, pues una vez sonaba el pitazo final, los miles de japoneses que se trasladaron a territorio galo para seguir los partidos de su seleccionado “que  por cierto era entonces entrenado por el francés Phillipe Troussier” sacaban enormes bolsas plásticas de sus mochilas para recoger los vasos plásticos, las envolturas de bocadillos y las latas, botellas y colillas de cigarrillo tirados al suelo de las tribunas. Una vez a tope, las fundas de basura eran depositadas en los tanques de volteo colocados a las entradas de cada estadio. Los equipos de limpieza alemanes disfrutarán de esta muestra de fervor cívico solamente en la primera ronda, porque los nipones difícilmente pasen a octavos en este Mundial.

La ficha

Clasificación FIFA: 17

Línea de apuestas y predicción: 1/300, eliminado en primera ronda.

Dirigente: Artur Antunes Coimbra, Zico.

Jugadores principales: Hidetoshi Nakata, Shinji Ono, Shunsuke Nakamura, Atsushi Yanagisawa, Naohiro Takahara, Junichi Inamoto, Yuji Nakazawa, Makoto Tanaka, Tsuneyatsu Miyamoto.

Federación: Asociación Japonesa de Fútbol.

Año de fundación de la federación: 1921

Año de afiliación a la FIFA: 1929

Participaciones en copas mundiales: dos (1998, 2002).

Palmarés en copas mundiales: cuartos de final en 2002.

Títulos y resultados importantes: tres veces campeón de la Copa Asiática (1992, 2000, 2004) y dos veces subcampeón de la Copa del Lejano Oriente (2003, 2005).

Clubes principales: Jubilo Iwata, Yokohama Marinos, Tokyo, Urawa Reds, Kashima Antlers, Gamba Osaka, Sanfrecce Hiroshima.

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