Francia y Rusia piden plazo para retiro tropas de Irak

Francia y Rusia piden plazo para retiro tropas de Irak

WASHINGTON.- Francia y Rusia piden que un plazo para el retiro de las tropas extranjeras de Irak, aunque no se establezca una fecha precisa, se incluya en el proyecto de resolución de la ONU que se discute en Nueva York, indicó el domingo el secretario de Estado norteamericano, Colin Powell.

«Los franceses, los rusos y otros sugirieron que se tenga en cuenta el factor tiempo en relación con la presencia de fuerzas multinacionales, aunque no haya una fecha concreta, dicen, a definir», declaró Colin Powell durante una entrevista con la cadena de televisión Fox News.

«Lo que proponen es una idea que comprendemos perfectamente, y es que después de la creación de una Asamblea Nacional en elecciones libres el año próximo, el gobierno que salga de ella debería tener ciertamente la posibilidad de reexaminar los acuerdos a los que se llegó con la fuerza multinacional en materia de seguridad», agregó.

«Y, dado que será un gobierno soberano, tendremos en cuenta lo que diga y escucharemos lo que diga», precisó Powell.

[b]Rumsfeld autorizó torturas[/b]

Por otro lado, el secretario de Defensa Donald Rumsfeld autorizó la expansión de un programa secreto que alentó la coerción física y la humillación sexual de prisioneros iraquíes a fin de obtener información sobre la creciente resistencia en Irak, dijo la influyente revista The New Yorker.

El artículo, escrito por el periodista Seymour Hersh, quien en los años 70 ganó un Pulitzer al describir los campos de exterminio en Camboya durante el régimen de Pol Pot, dijo que Rumsfeld decidió extender el programa el año pasado, ampliando un operativo del Pentágono para la cacería de miembros de al-Qaida en Afganistán a fin de interrogar presos en la cárcel Abu Ghraib de Bagdad, uno de los más notorios centros de torturas y asesinatos en la época de Saddam Hussein.

El Departamento de Defensa negó las acusaciones de Hersh, que citó oficiales de inteligencia actuales y pasados a los que no identificó. El artículo apareció el sábado en el portal de acceso del New Yorker en la internet. El vocero del Pentágono Lawrence Di Rita emitió un comunicado diciendo que las aseveraciones de Hersh eran «descabelladas, alimentadas por alguien que ve conspiraciones en todas partes, y repletas de errores y de conjeturas anónimas».

Siete soldados han sido acusados por el ejército del abuso y humillación de presos, luego de divulgarse fotografías de maltratos.

De acuerdo al artículo, el operativo inicial autorizado por Rumsfeld dio aprobación indiscriminada para asesinar o capturar e interrogar objetivos «valiosos» en la lucha contra el terrorismo.

El programa recibió la sanción de la asesora de seguridad nacional del presidente George W. Bush. Inclusive Bush fue informado de su existencia, dijeron funcionarios a Hersh.

De acuerdo al programa, señaló Hersh, comandos estadounidenses llevaron a cabo interrogatorios instantáneos, usando la fuerza cuando era necesario, en centros secretos de detención de la CIA dispersos por todo el mundo.

El año pasado, Rumsfeld y Stephen Cambone, subsecretario de Defensa para labores de inteligencia, ampliaron el programa del Pentágono y exportaron los métodos a Abu Ghraib, escribió Hersh.

Críticos dicen que las normas de interrogación, establecidas por primera vez en septiembre luego de una visita a Irak por el entonces comandante de la prisión de Guantánamo, Cuba, dieron luz verde a los interrogadores para que cometieran abusos contra los presos.

Un funcionario de inteligencia dijo que la CIA concluyó su participación en el programa de la cárcel de Abu Ghraib a fines del año pasado.

«Ellos dijeron, ‘De ninguna manera. Aceptamos el programa para Afganistán, que fue aprobado previamente por operativos contra objetivos terroristas de alto valor, y ahora quieren que lo usemos para taxistas, cuñados y personas detenidas en las calles»’, indicó la fuente.

[b]EU perdió argumento moral[/b]

FRÁNCFORT (RFA) (EFE).- El escritor peruano Mario Vargas Llosa opina que en EEUU «ha perdido el argumento moral» para la intervención en Irak debido a los casos de torturas de presos iraquíes y afirma que recuperarlo «será difícil, costará mucho tiempo y me temo que también mucha sangre».

En la presentación hoy en Fráncfort de su último libro, «El paraíso en la otra esquina», Vargas Llosa dijo a EFE que, aunque se corrija esta política y se sancione a los responsables, «el proceso de democratización y transferencia de poder en Irak será mucho más difícil».

«El sector moderado en Irak es ahora tan crítico con EEUU como los extremistas», añadió el escritor.

Para el autor de «Conversación en la catedral», al no encontrarse armas de destrucción masiva ni probarse la relación entre Sadam Husein y Al Qaida, «la única argumentación con peso moral para defender la intervención en Irak era acabar con una dictadura sanguinaria».

«Pero, de pronto, aparecen esas fotos que muestran unos crímenes terribles», añadió Vargas Llosa.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas