Francisca atribuye su éxito a la perseverancia y fe puesta en Dios

Francisca atribuye su éxito a la perseverancia y fe puesta en Dios

En cada paso y meta que se propone Francisca pone a Dios en el centro, convencida de que Él siempre la escucha y le acompaña hasta lograrlo. Así lo expresó la presentadora dominicana del programa ‘Despierta América’ en la conferencia “El poder está en ti. Una montaña rusa para conquistar mis sueños”, impartida en el marco de “Days to Shine”, evento que tiene como objetivo empoderar a las mujeres de República Dominicana a través del amor propio.

Con el carisma y la alegría que le caracteriza, Francisca entró al salón Gran Embajador del hotel El Embajador a ritmo de la canción ¡Vive!, compuesta por José Antonio Rodríguez y popularizada por Milly Quezada.

Bailando y aplaudiendo ese tema, la criolla pidió al público ponerse de pie para celebrar la vida; también agradeció que aceptaran la invitación de asistir a esa conferencia motivacional, a escuchar su historia de vida y cómo ha logrado el éxito en sus diferentes facetas.

Puede leer: Comunidad China en RD celebra el Festival de Medio Otoño

Francisca partió desde el génesis de su vida imágenes de su infancia en Azua de Compostela, en la región Sur de República Dominicana, donde nacieron sus sueños de ser una gran presentadora en el plato del baño que construyó su padre, antes de partir cuando ella era una niña de cinco años.

“Ese era el único lugar de la casa que tenía plato y yo me subía constantemente a volar con mis sueños, a orar y a pedirle a Dios por oportunidades de crecimiento, visa, novio, etc. En ese plato yo sentía que estaba muy cerquita de Dios, quien me ha permitido cumplir mis sueños”, expresó muy emocionada.

Sus claves para triunfar

Sosteniendo una conversación franca y emotiva, Francisca hizo un repaso por su historia y detalló las siete claves que considera han sido vitales para llegar hasta donde está hoy.

La primera clave es “Creer en nuestros sueños”. Para hablar de este tema se remontó al 2004, cuando le hizo a Dios un pedido de fe. Seis años después le dio forma a sus sueños y para graficarlo, a la audiencia tarareó “esta es la suerte de mi vida vivir en Nueva York”, un famoso merengue interpretado por Los Hermanos Rosario.

En ese año viajó a esa ciudad estadounidense en busca de sus sueños, tanto así que logró convencer al cónsul que le otorgó la visa, de que no se quedaría allá, pero lo hizo a sabiendas de que no sería fácil, que tendría que saltar muros y esquivar muchos obstáculos para llegar a la meta. Sin dudas, su vida ha sido una montaña rusa de emociones y esfuerzos.