Ante la cancelación del presupuesto que adjudicaba la actuación de Frank Ceara para el Premio Nacional a la Calidad, que organiza el Ministerio de la Administración Pública (MAP), el artista aclaró que lo acordado en término monetario no solo incluía su actuación per se, como han manejado algunos medios de comunicación.
El cantautor explicó que la institución solicitó que se realizara una cotización (no aprobada) que incluía un nuevo arreglo musical al himno de la entidad, el cual había escrito hace 20 años, y dos interpretaciones, una del himno y otra canción de su repertorio, las que estaría montada con una producción que incluiría un cuerpo de ocho bailarines.
El presupuesto comprendía los gastos del nuevo arreglo musical, pago a los músicos, alquiler de estudio de grabación, pago a los bailarines y al coreógrafo. Alquiler de 16 vestuarios para bailarines que usaría durante la presentación de los dos temas y alquiler de salón de ensayo, más el costo de la producción de los dos números musicales y la presentación del artista el día del evento.
“Yo soy de las personas que abrazan la verdad, porque soy 100 % de Cristo y esa es mi verdad, yo no estaba cotizando 900 mil pesos por cantar solamente el himno de la institución, se trató del montaje de una producción con dos temas, arreglos musicales, bailarines y todo eso tiene un costo”, expuso el artista en un comunicado de prensa.
Ceara dijo sentirse indignado al ver cómo se ha manejado esta información en los medios de comunicación y expresó que, cada uno tiene derecho a ponerle precio a su arte y a darle valor a su trabajo.
“Simplemente se trató de una cotización que me solicitó el MAP por un servicio que incluía otros elementos y que no era simplemente ir a catar a un tema a un evento. Como hacen todas las instituciones del estado con estos documentos, son expuestos al público con el objetivo de darle mayor transparencia”, expuso.
El artista agradeció a la institución gubernamental por la consideración al valorar su arte y su trabajo; y lamentó el inconveniente ante la sociedad dominicana, que, en estos momentos, se encuentra muy sensible ante el anuncio de la “Ley de modernización fiscal”.