Franklin Almeyda Rancier, exministro de Interior y Policía y miembro de la Dirección Política del Partido Fuerza del Pueblo.
El dirigente peledeista Franklin Almeyda Rancier advirtió que el respeto a la Constitución es un tema de raíz histórico para el Partido de la Liberación Dominicana, por lo que una parte de su militancia y el pueblo ve la Carta Magna del 2010 como una referencia de la de 1963.
Almeyda Rancier quien es miembro del Comité Político de la organización oficialista consideró además, que las pretensiones de implementar el sistema de primarias abiertas, pese a que una sentencia la declaró inconstitucional, es un ensayo de ejercicio contra la Carta sustantiva con lo que se estaría buscando otros propósitos.
Criticó que el ministro administrativo de la Presidencia José Ramón Peralta sostuviera una reunión con 25 senadores del PLD, en una cena que le ofreció en su residencia, y en la cual no participaron los congresistas de la Cámara Alta que se identifican con el presidente Leonel Fernández.
Entrevistado por Héctor Herrera Cabral en el programa D´ AGENDA que cada domingo se difunde por Telesistema Canal 11, el exministro de Interior y Policía definió la situación del partido oficial “como una calma chicha, que arribas las aguas del río se ven tranquilas pero abajo hay corrientes muy fuertes“.
Explicó que se han estado haciendo esfuerzo para un entendimiento y despejar el camino, pero se nota y aprecia que más adelante, y no muy lejos, alguien quiere derribar unos árboles en medio de ese camino.
“Y todo porque se acostumbran al poder, y no se dan cuenta que el mandato del presidente Danilo Medina termina en el 2020, que no hay posibilidades ningunas de un tiempo mayor de ahí“, sentenció el dirigente del partido morado.
Precisó que para una parte importante del PLD el tema de la Constitución es algo sagrado, porque es un tema de raíz histórica en esa entidad política.
“Juan Bosch fue derrocado en 1963, y con él también se fue la Constitución, que el propio líder peledeista la trabajó con un equipo, luego año y medio después el pueblo dominicano se lanzó a la reposición de ese gobierno, bajo el planteamiento de retorno a la constitucionalidad sin elecciones“, recordó Almeyda.
Precisó que a partir de esa fecha nadie se ha atrevido hablar de golpe de Estado en este país, y nadie, excepto el presidente Joaquín Balaguer, se ha atrevido a llamar a la Constitución que es “un pedazo de papel“.
Dijo que a Balaguer se le toleró que dijera eso porque se trata de la Constitución que el auspició en 1966 cuando asumió el poder, después de la Guerra de abril de 1965.
Pero para la sociedad dominicana, y para una parte importante del PLD, la Constitución del 2010 está referida a “La carta de 1963, y es un legado histórico que el PLD va dejando, tocarlas para nosotros es un tema de oleadas no controladas“ señaló.
Argumentó que utiliza el tema tocarlas porque cuando se habla de primarias con padrón abierto, se está hablando de que ya la Constitución vigente en su artículo 277 establece que las decisiones adoptadas por la Suprema Corte de justicia, en materia de inconstitucionalidad no se puede tocar, y específicamente la sentencia de marzo del 2005, declaró no conforme con la Constitución las primarias con padrón abierto.
Critica que ministro José Ramón peralta se reuniera con 25 senadores del PLD
Franklin Almeyda criticó que el ministro administrativo de la Presidencia José Ramón Peralta se haya reunido el pasado miércoles con 25 senadores del Partido de la Liberación Dominicana en una cena que se habría llevado a cabo en su residencia de esta capital.
“Eso es lo que crea que por ejemplo algunos funcionarios importantes, como el caso de José Ramón peralta este miércoles pasado convocó a 25 senadores a una cena en su casa, es la información que tengo, espero que me desmientan“, reveló el miembro del Comité Político del PLD.
Se preguntó que por qué el ministro Peralta dejó cuatro senadores fuera que se supone podrían estar con Leonel Fernández.
“Pero además que atribuciones tiene él para convocar a los senadores, porque una cena social es una cosa y una cena-reunión es otra, por eso es que aquí hay un problema de confusión de roles, rol de gobierno y rol de partido“
Dijo que al ver esa actitud y otras como gente allegadas al gobierno promoviendo el tema de la reelección, se trata de presión que se ejercen sobre el presidente Danilo Medina en esa dirección.
“Por qué insisten en las primarias abiertas, lo que esconde ese planteamiento, lo que no se ve, es que es un ensayo de un ejercicio contra la Constitución, si ahí se imponen, se imponen de nuevo una apertura a la reelección, y ese es un punto que crea una especie de escozor a la población dominicana y de vigilancia“, acotó Almeyda Rancier.
Insistió en que si quieren imponer las primarias abiertas, no lo podrán en el Congreso porque la ley es orgánica y se requiere las dos terceras partes para completar, y es el Partido Revolucionario Moderno que tiene los votos faltantes y ha dicho en reiteradas ocasiones que se opone a esa forma de escogencia de candidatos.
“Hay gente que está gobernando que se creen que con gobernar tienen el poder y que en consecuencia ganan como quiera, pero eso no es así“, advirtió.
Reveló que el último invento, que ha escuchado se quiere hacer, es tratar de pasar esa legislación como una ley ordinaría lo que violaría el artículo 112 de la Constitución, que incluye al sistema electoral dentro de esas leyes especiales.
Sobre la denuncia que hizo el senador Euclides Sánchez de que Leonel Fernández está haciendo reuniones con disgustados del PLD, Franklin le recordó a Euclides, que el presidente del partido y el secretario general tienen las prerrogativas estatutarias para reunirse cuantas veces quieran con la militancia peledeista.
Explicó que quien no puede hacerlo son los funcionarios del gobierno, incluyendo al ministro José Ramón Peralta, que en el encuentro que habría realizado, estuvo presente el representante de la Cámara Alta de la provincia de la Vega.
Franklin dijo además que el único camino que le queda al PLD es entenderse, cohabitar, respetando la diversidad de criterios, pero sin aplicar ningún tipo de retaliación.