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Boston Herald /ST. PETERSBURG, Fla. La frustrante temporada de David Ortiz terminó de igual forma, frustrante. Ortiz recibió tres oportunidades con corredores en base en el séptimo juego de la Serie de Campeonato y se ponchó dos veces y en el tercero forzó un corredor para silenciar posibles rallies.
El hecho de que tuvo sólidos turnos al bate quedó lejos de ser una consolación luego de la derrota 3-1 para quedarse fuera de la Serie Mundial.
Hice lo mejor que pude, pero no siempre va a salir bien, dijo Ortiz. A veces pasan cosas malas.
Los fanáticos de los Medias Rojas se habían mal acostumbrado a que cada vez que tuviera una oportunidad, Ortiz respondiera. Pero este año fue diferente. Una lesión de la muñeca en mayo le robó su poder y el cambio de su compañero toletero Manny Ramírez, dos meses después, lo dejó totalmente solo.
El mismo domingo, Ortiz admitió que el equipo extrañó a su hermano de batalla.
Claro que uno extraña a Manny, dijo Ortiz. Uno sabe que Manny es el tipo de gente que sabe cómo responder en octubre. Manny es uno de los mejores bateadores del juego. Claro que extrañamos a Manny. No te voy a mentir.
Es difícil decir si con Ramírez bateando detrás de él la historia hubiera sido otra. Reconoció que el tendón parcialmente desgarrado en su muñeca izquierda nunca se sanó por completo aunque negó que necesitara operarse.
Solo descanso y un poco de hielo, dijo.
Ortiz señaló que la muñeca se inflamaba cada vez que viajaba, un problema más agudo durante la postemporada.
Fue un poco loco luego de los viajes, dijo. No había nada que pudiera hacer excepto lidiar con eso. Este fue un año duro para todo el mundo. No es el mismo equipo que teníamos el mismo año. Tuvimos muchas lesiones. Nos faltó Mikey Lowell, Julio Lugo, Josh Beckett estaba afectado, mi muñeca me dio problemas, no teníamos a Manny, no tuvimos a Curt Schilling el año pasado. Fue un equipo diferente al del año pasado.
Aun así, Ortiz tuvo sus chances. Se ponchó para cerrar la tercera entrada con Dustin Pedroia en segunda base. Abanicó de nuevo en el sexto con Pedroia. Con corredores en primera y segunda en el octavo, forzó por la 46 a pesar de batear de foul varios lanzamientos de J.P. Howell.
Uno siempre se siente bien cuando David está en esas situaciones, dijo el coach de bateo Dave Magadan. Matt Garza tenía una recta viva, es difícil descifrarlo.
Ortiz le dio crédito a los Rays por amarrarlos y los describió como buenos campeones.
Me tiraron muy bien, dijo Ortiz. No voy a mentirles.
Las frases
David Ortiz
Uno sabe que Manny es el tipo de gente que sabe cómo responder en octubre. Manny es uno de los mejores bateadores del juego. Claro que extrañamos a Manny. No te voy a mentir.
Dave Magadan
Uno siempre se siente bien cuando David está en esas situaciones.
