WASHINGTON
AFP. El presidente estadounidense Barack Obama urgió ayer a los miembros del Congreso a aprobar un presupuesto agrícola que ayudaría al sector de la agricultura a enfrentar la sequía más severa que ha afectado a Estados Unidos en medio siglo.

  El Congreso «necesita aprobar un presupuesto agrícola no sólo para ayudar a los granjeros y rancheros a responder a este tipo de desastres, sino también a realizar las reformas necesarias que les den alguna certeza durante todo el año», dijo Obama en su alocución semanal por radio e internet.

   «Ese es el mejor camino para ayudar ahora a las comunidades rurales, y también a largo plazo», añadió.   El llamado se produce un día después que el Departamento de Agricultura redujera los estimados de producción para sus cruciales cosechas a escala mundial de maíz y soja, señalando que el récord de altas temperaturas a lo largo del cinturón agrícola del país llevó las expectativas de producción a su nivel más bajo en seis años.  

El departamento predijo que los precios del maíz se elevarían a 8,90 dólares el bushel (un bushel = 25kg), comparado con la proyección de julio, que era de 6,40 dólares.

El precio de la soja se espera que alcance entre 15 y 17 dólares por bushel, dos dólares más que el pronóstico estimado el mes pasado.  

El reporte señaló que el récord de altas temperaturas en todo el país durante el mes de julio dañó ambas cosechas, llevando al maíz a su menor producción por acre desde 1995, y para la soja al nivel más bajo desde 2003.  

Obama dijo que la mitad de la cosecha de maíz en Estados Unidos estaba en mala o muy mala condición, mientras que los ganaderos luchaban por poder alimentar a sus animales.   «Y si no logramos llevar alivio pronto» a esta situación, los «estadounidenses en todas partes comenzarán a sentir el impacto, con altos precios en los supermercados de todo el país», advirtió.

  Los analistas indican que el alza en esos precios, junto a incrementos en los precios de la gasolina, podrían producirse justo antes de las elecciones presidenciales y legislativas del 6 de noviembre, impactando en el resultado electoral.  

El presidente señaló que la Casa Blanca ha estado trabajando con el Departamento de Agricultura y otras agencias para asegurarse que el gobierno esté haciendo todo lo posible por ayudar a los agricultores y ganaderos a recuperarse de este desastre generado por la sequía y las altas temperaturas.