Agentes de la Policía impidieron ayer  que campesinos de las comunidades Las Taranas, Aserradero y Mataseco, de Sabana Grande de Boyá ocuparan  las oficinas municipales  en protesta contra los daños causados a sus propiedades.

Los agricultores marcharon por las calles de Sabana Grande de Boyá, pero cuando se acercaban a las oficinas del CEA los policías formaron una barrera humana, por lo que tuvieron que desistir de sus planes.

Manuel Benítez, asesor técnico del MCCU, dijo que los responsables del CEA en Sabana Grande de Boyá, el capitán Claudio Ricart y Raúl Mota, se aprovecharon de las festividades navideñas para cortar los alambres de las parcelas que tienen más de 50 años en poder de los campesinos.

Los representantes del CEA alegan que las tierras que ocupan los agricultores fueron vendidas o arrendadas,  pero que la intención es entregárselas a militares y funcionarios.