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Para Diómedes Núñez Polanco, quien me pidió estas notas.
De una y otra forma, Juan Bosch nos pidió que nos quedáramos a Antonio (Tonito) Abréu Flores, José Joaquín (Chichí) Bidó Medina, Rafael (Rafaelito) Alburquerque Castro, José Francisco (Franklin) Almeida Rancier, Manuel Ramón (Moncho) García Germán y a Bonaparte (K.Bito) Gautreaux Piñeyro, a quienes convocó para las 9 de la mañana del día siguiente, domingo. Nos reuniríamos en la casa de Franklin. Debíamos asistir acompañados por nuestras esposas puesto que íbamos a tener un almuerzo.
Bosch llegó con la puntualidad de siempre. Vestía pantalón gris y un saco deportivo azul. No llevaba corbata.Se sentó y tan pronto pasaron los saludos sacó del bolsillo interior derecho un papel que contenía la siguiente inscripción:
Partido de la Liberación Dominicana
Y ante de que nadie pudiera hacer algún comentario dijo:
Y le van a decir PLD, que se parece a PRD.
Aunque la ocurrencia nos tomó de sorpresa, la inmediata reacción fue de rechazo a la propuesta. La discusión que se inició tan pronto dio a conocer su posición agotó toda la mañana y las primeras tres horas de la tarde. Ante los argumentos del líder, uno tras otro fue vencido en la resistencia que opusieron al principio.
La discusión continuó después del almuerzo. Mi posición era clara: echar la pelea dentro del PRD. Al final, para ceder argumenté que se trataba de un asunto de grupismo y dado que mi grupo era el de Bosch, no el de Peña Gómez, no había que discutir ni explicar más.
A García Germán y a mí se nos ordenó que tomáramos el partido y lleváramos los archivos a la casa de Bosch. Antes de ir al entonces local del PRD, pasé a buscar a mi hijo mayor, Julio Heberto Gautreaux Martínez, entonces de 9 años y le dije: ven para que veas cómo se hace la historia.
Nos hicimos acompañar por dos compañeros. Sacamos los archivos y cuando llegamos a casa de Bosch, él hacía convocado una rueda de prensa para anunciar la renuncia del PRD y el nacimiento del PLD.
De ahí en adelante se desarrolló la historia que todos conocen.
Es oportuno recalcar que sólo las personas citadas arriba participamos en tan histórica reunión.
Nuestras esposas, Milagros Cartagena de García Germán, Martha Montes de Oca de Alburquerque, Rhina Pastor de Almeida, la anfitriona, Miriam Martínez de Gautreaux, Isabel de Bidó Medina y no recuerdo si también Carmen Quidiello de Bosch, estuvieron en la casa, pero no participaron en la reunión.
Después pasa como con los Comandantes de la Guerra de Abril de 1965, ahora aparecen hasta jóvenes que no habían nacido cuando la gesta, pero se precian de haber sido Comandantes.
En el PLD, entre los cadetes y los que no habían llegado, todos los días aparece una persona que dice que es fundador de la organización.
Sí fueron de los primeros inscritos en el partido.