LONDRES, (AFP) – El fundador de WikiLeaks, Julian Assange, apeló ante la Alta Corte de Londres el fallo emitido la semana pasada por un juez británico de extraditarlo a Suecia, país que lo reclama para procesarle por presuntos delitos de agresión sexual, anunció este jueves una fuente judicial.
La propia Corte confirmó a través de un portavoz que los abogados del australiano, cuyo plazo para recurrir culminaba al final de la jornada, han hecho las gestiones necesarias, pero que todavía no se ha fijado una fecha para examinar la apelación.
El juez de primera instancia Howard Riddle autorizó el 24 de febrero la extradición de Assange a Suecia, que emitió una orden de captura contra él después de que dos mujeres le denunciaran en ese país por una presunta violación y otras tres agresiones sexuales.
Assange, contra quien por el momento no se han formulado cargos formales, niega haber cometido los delitos que se le atribuyen, aunque admite haber mantenido relaciones consentidas con ambas durante una estancia en Estocolmo en agosto pasado.
El ex hacker, de 39 años, sostiene que el caso responde a motivaciones políticas tras la reciente difusión en su página WikiLeaks y en varios diarios de prestigio de miles de cables confidenciales de la diplomacia norteamericana y documentos secretos sobre las guerras de Irak y de Afganistán.
La apelación no es una sorpresa, pues los abogados de Assange ya habían anunciado su intención de agotar todos los recursos para evitar la extradición de su cliente, lo que podría alegar el proceso varios meses y llevarlo hasta la Corte Suprema británica e incluso la Corte Europea de Derechos Humanos.
Sus defensores alegan que no sería sometido a un juicio justo debido a la espiral de publicidad negativa que ha rodeado el caso, y que existe un «riesgo real» de que, una vez en Suecia, el creador de WikiLeaks sea enviado a Estados Unidos, donde temen sea condenado a muerte o enviado a Guantánamo.
El gobierno norteamericano, que siempre se ha desmarcado de este «caso entre Gran Bretaña y Suecia», estudia desde hace meses la manera de acusarlo formalmente por espionaje, pero por el momento tampoco ha formulado ningún cargo contra él.
El miércoles, sin embargo, la fiscalía militar estadounidense presentó 22 cargos contra Bradley Manning, el soldado norteamericano sospechoso de haber suministrado miles de documentos secretos a WikiLeaks, el más grave por «ayudar al enemigo».
Esta acusación, que se suma a las 12 que ya tenía previamente, puede acarrear la pena de muerte, aunque la misma fiscalía dijo que decidió no pedir esa condena para el joven militar, de 23 años.
El analista de inteligencia militar en Manning, quien se encuentra en régimen de aislamiento absoluto en una prisión militar del estado de Virginia desde su detención en julio pasado, podría ser condenado sin embargo a cadena perpetua.