LONDRES. AFP – El fundador de Wikileaks Julian Assange puede ser extraditado a Suecia como sospechoso de cuatro supuestos delitos de agresión sexual, dictaminó el miércoles la Corte Suprema británica, que otorgó a la defensa 14 días de plazo para pedir la reapertura del caso. 

«La solicitud de extradición de Assange ha sido efectuada legalmente y su apelación contra la extradición es por consiguiente rechazada», declaró Nicolas Phillips, presidente de la máxima instancia judicial británica, al anunciar el fallo aprobado con los votos favorables de cinco de los siete jueces del panel.

El australiano, de 40 años, brilló por su ausencia en el juzgado durante esta vista de 10 minutos en la que, en un giro inesperado, sus abogados obtuvieron un aplazamiento de dos semanas de la aplicación de la sentencia para poder solicitar formalmente una reapertura del caso por «una cuestión de procedimiento».

«Nos han dado dos semanas para presentar nuestros argumentos por escrito sobre el hecho de que la mayoría de los jueces ha dictaminado en base a elementos que nunca se discutieron», declaró Gareth Peirce, una de las abogadas de Assange, al final de la vista.

Según ella, la referencia de la Corte Suprema (CS) en el veredicto a la Convención de Viena sobre el Derecho de los Tratados Internacionales constituye una «violación de su derecho a un juicio justo».

Si la CS rechazara este requerimiento inesperado, Assange tendría una última posibilidad de apelar en un plazo de siete días ante la Corte Europea de Derechos Humanos (CEDH) de Estrasburgo (Francia), que a su vez dispondría de otros 14 días para pronunciarse sobre su admisibilidad.

Todo esto, podría alargar todavía durante varios meses más la saga judicial de Assange, que comenzó en diciembre de 2010 con la detención de Assange en virtud de una orden de arresto europea emitida por la fiscalía sueca.

Antes de la Corte Suprema, un tribunal de primera instancial y el Tribunal Superior de Londres ya habían dado luz verde a la extradición.   Las autoridades de este país requieren a Assange para interrogarlo como sospechoso de cuatro supuestos delitos de agresión sexual, incluida una violación, denunciados por dos mujeres en Estocolmo, y por los que hasta hoy no ha sido aún formalmente acusado.

La Corte sólo se pronunciaba sin embargo sobre si un punto de «interés general», a saber si un fiscal tiene potestad para solicitar una extradición.   La defensa del australiano argumentó durante la vista que al ser el fiscal parte implicada en el caso, la euroorden «carecía de validez ante la ley».

Una veintena de partidarios de Assange, con pancartas con lemas como «No disparen al mensajero», se congregaron desde pronto por la mañana ante el edificio de la Corte Suprema, situado enfrente del Parlamento, al que el hacker no pudo llegar aparentemente por problemas de «tráfico», según sus abogados.

Aunque admite haber mantenido relaciones sexuales consentidas con las dos denunciantes, Assange sostiene desde el principio el caso está políticamente, motivado por la difusión en su web Wikileaks de decenas de miles de cables diplomáticos estadounidenses confidenciales y documentos secretos de las guerras de Irak y de Afganistán, que indignó a Washington.

El australiano teme que Suecia no sea más que una etapa antes de ser entregado a Estados Unidos, país que busca desde hace meses la manera de acusarlo y que según informaciones no confirmadas podría haberlo hecho ya en secreto.

La madre de Assange, que viajó desde Australia para estar junto a su hijo, insistió el martes por la noche a una cadena de televisión de su país que «los principales gobiernos del mundo andaban a la caza» del creador de Wikileaks.