RAMALA. AP. Cientos de jóvenes palestinos hicieron cola al filo de la madrugada a la entrada de un hotel de lujo un día reciente, a fin de participar en el principal concurso televisivo de talento musical, deseosos de conseguir fama y fortuna, y de abandonar su vida de conflicto y pobreza.
Es la primera vez que el programa “Ídolo de los árabes” realiza sus audiciones en los territorios palestinos, todo un acontecimiento en una región donde escasean las razones para celebrar.
“Tenemos que poner a Palestina en el mapa. Este es el primer concurso que viene aquí a reclutar talento y seguramente después vendrán otros”, estimó Mohammed Assaf, el ganador del concurso de 2013.
Assaf, un joven que cantaba para bodas en un campamento de refugiados en la Franja de Gaza, se volvió famoso en el mundo árabe de la noche a la mañana gracias a su sonrisa resplandeciente, su carisma y su capacidad de superar las adversidades.
En conversación con The Associated Press, Assaf dijo que tuvo que rogarle al grupo Hamas que le permitiera salir del territorio, después tuvo que sobornar a guardias fronterizos egipcios para que le dejen viajar hacia el Líbano para poder competir.