Crece más la demanda de población que quiere vacunarse
Han sido inmunizadas con la primera dosis para enfrentar la covid-19 por lo menos 105,575 personas, informó ayer el Gobierno dominicano a través del Gabinete de Salud. Esa cantidad de personas han recibido la primera dosis de las vacunas contra el coronavirus, en el marco del Plan Nacional de Vacunación iniciado por las autoridades el 16 de febrero y que ahora se centra en los adultos mayores a los 70 años.
La primera población a vacunar fue el personal de salud que está en la primera línea en la atención a pacientes de covid-19.
El Programa Ampliado de Inmunizaciones (PAI), busca dotar de la vacuna contra covid-19, a la población dominicana. El número de personas que ha sido vacunada contra la enfermedad, pautadas dentro de esta primera fase, ha ido creciendo conforme se ha avanzado en los niveles de implementación del plan de vacunación nacional, dijo en un documento el Gabinete de Salud.
De las 105, 575 personas que han sido vacunadas, 31,610 recibieron la primera dosis el lunes, constituyendo en el día en que la mayor cantidad de personas han acudido a los más de 600 puestos de vacunación habilitados con el propósito de proteger la integridad del sistema de salud, así como reducir la mortalidad asociada a covid-19 y la morbilidad severa.
En esta primera fase serán vacunados los ciudadanos y ciudadanas con mayor riesgo de contagio, así como quienes forman parte de los grupos más vulnerables por edad y por comorbilidades definidas.
De ese modo, se ofrece protección integral de todos los ciudadanos, iniciando con el personal de salud y docentes de inicial y primaria, que junto a los adultos mayores de 70 años de edad, han dado muestra de civismo y participación activa el el proceso. En la medida en que llegan las diferentes vacunas, crece la demanda de la población y el entusiasmo por inmunizarse.
Sin embargo, en algunas regiones y zonas del país, los médicos tienen que emplearse a fondo para convencer a la gente de que se inmunice. En una zona rural de San Francisco de Macorís, el médico de la comunidad tuvo que ir a la iglesia a convencer a la gente para que se vacune.