De nuevo en mi salida para llegar a la ciudad de San Pedro de Macorís, camino sus calles para buscar una vivienda de curiosa formación estructural y, como siempre, la encuentro.

Es una residencia situada en la calle Eugenio Rojas número 3, la cual es de dos niveles y su construcción frontalmente varía totalmente, debido a que su primer nivel posee una arcada compuesta de cuatro arcos escarzanos; donde los dos del medio que son más amplios, su superficie detrás dejan el espacio para dar entrada a un vehículo, sin embargo, los de los laterales, el de la derecha es estrecho con un metro de ancho pero el de la izquierda tiene dos metros de ancho, el cual sirve de entrada al edificio.

Estos están levantados por columnas redondas de cuerpos lisos, las cuales están cerradas con rejas. Al fondo a la derecha también se percibe una puerta que va al segundo nivel y otra al centro que es más ancha la cual da entrada al primer nivel.

El cuerpo de esta arcada comienza desde la mitad frontal de la residencia sobresaliendo con cuatro metros hacia delante, excepto el arco del centro donde está el acceso a la vivienda, uniéndose en la parte superior al segundo nivel, en el que se aprecia el decorado de un balcón con balaústres normales sin techo, el cual en la parte atrás para el lateral derecho continúa y es donde se pueden observar que tiene cuatro ventanas.

Allí, al fondo este segundo nivel la ocupa una amplia galería con un mismo arco escarzano, aparentemente en cada lado sostenida por una corta columna, esta vez dórica, que en los laterales su cuerpo deja una estrecha abertura. Su pared frontal alrededor posee una moldura de concreto la cual en la parte superior está formando parte de un pentágono y en cada lado presenta un farol.  Este primer nivel a partir del medio, pero más retirado hacia atrás posee otra galería con un balcón, en el cual delante se visualiza un jardín cuya curiosidad consiste en centralmente tener una pequeña fuente con tres cuencas las cuales encima tiene bordes curvos estriados.

En cambio, este primer nivel su cuerpo arriba se une al segundo nivel, el cual centralmente posee una ventana arqueada con un tragaluz dividido por cuatro cristales y cerrado por un grupo de vidrios formando pequeños cuadros. Delante lo ocupa otro balcón interno que no sobresale, y también en los lados hay otros pequeños faroles.

El friso del cornisamento es una extensa pared lisa y la cornisa para el lateral derecho encima la corona el cuerpo de una pequeña habitación con puerta y ventana que sirve para dar entrada a él, la cual en la parte superior está cubierta por un techo de concreto liso inclinado hacia atrás.