La activista feminista Sergia Galván llamó a las autoridades a cumplir con sus compromisos en materia de protección a la niñez tras calificar como aberrante la violación de una niña de 11 años por su padrastro, quien además la embarazó, un crimen que dañará su salud física y mental y sus proyectos futuros.
Apuntó que mueve a gran preocupación el hecho que una niña de 11 años fuera violada desde los 5 por su padrastro y que actualmente esté embarazada por la violación; y que haya otra niña violada por su padre desde los 9 años y que, según la madre de la víctima, haya sido dejado en libertad tras pagar supuestamente un soborno y huyera a los Estados Unidos.

“En el caso de la niña de 11 años que resultó embarazada, a los años de tortura sexual a manos del padrastro se suma ahora el acto de inhumana crueldad que la obliga a traer al mundo al hijo de su violador. “¿No son acaso las autoridades cómplices de esta barbarie? ¿Dónde está la garantía de sus derechos? ¿Que espacio tiene el interés superior de la menor?”.

Citó que en el 2015 la Procuraduría reportó 1,767 casos de “seducción de menores” y 236 casos de incesto, cifras escalofriantes si se toma en cuenta el alto subregistro que caracteriza estos crímenes, por complicidades en la familia, amenazas de los agresores, por corrupción e ineficiencia en el sistema judicial.

Indicó que la misma terminología utilizada por la ley remite un alto grado de tolerancia legal y social ante este problema, “¿o acaso podemos siquiera concebir que una niña de cinco años pueda ser “seducida” por un hombre adulto?”.

Deploró la gran cantidad de niñas entre 11 y 15 años que llegan embarazadas a los hospitales sin que las autoridades den siquiera una voz de alerta.
Indicó que las autoridades son indolentes ante los constantes abusos sexuales a menores.

Además manifestó su indignación ante la actitud hipócrita y desalmada de los actuales legisladores y sus aliados de ultraderecha, que siguen empecinados en negar a niñas y mujeres el derecho de poner fin a un embarazo indeseado producto de violencia sexual.