En la entrega de ayer lunes analicé los sospechosos pormenores en relación al informe divulgado por el Departamento de Estado alusivo al crimen que campea en nuestra sociedad, inocultable e innegable. Sospechoso es el informe, reitero, porque fue elaborado hace tres años y divulgado esta semana en que ocurrieron los episodios señalados ayer.
Parece que el informe hubiese sido redactado a fines de mayo último, porque tiene una vigencia increíble.
Diario Libre del 16 de este mes insertó una noticia que revela que en mayo último perecieron 143 personas, entre ellas 52 por los consabidos intercambios de disparos, modalidad moderna del fusilamiento provisional del presidente Ulises Heureaux, el terrible Lilís, así como 28 por delincuentes.
La Información del 17 insertó una noticia en la que familias cibaeñas expresan su preocupación por el auge de la delincuencia por 20 atracos y robos.
Robaron mercancías en Multicentro La Sirena de la Charles de Gaulle y asaltaron una sucursal de la Asociación de Ahorros y Préstamos de Villa Consuelo. Hasta el Nuncio José Wesolowski denunció auge delincuencia en La Información del día 17.
También el 16 Diario Libre publicó otra noticia relacionada con el asalto de 13 negocios en Boca Chica y dice que la Policía luce incompetente.
El día once fue abatido a balazos en el gimnasio del hotel Jaragua el ingeniero Héctor Ortega Castillo, mientras conversaba por teléfono con su esposa Hilma Rosina Mejía Sánchez.
Tanto al comandante policial de Santiago, general Raudo Ramírez Comas, como al jefe de la uniformada, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, le han llovido torrencial de acusaciones por estos hechos. Finalmente, el 17, Diario Libre insertaba una noticia en la que el titular de Interior y Policía, Franklin Almeyda Rancier, entregaba al jefe policial 78 motores de patrullaje. Es precisamente con patrullaje y recursos como se enfrenta el crimen.