García apoya pena muerte a pedófilos

García apoya pena muerte a pedófilos

LIMA (AFP).- El presidente peruano, Alan García, instó a sus ministros a respaldar su propuesta de pena de muerte para los violadores y asesinos de niños, en momentos en que el debate polariza al país y amenaza con erosionar a su flamante gobierno.

García ha enfatizado en las últimas 24 horas que su tarea es cumplir con sus promesas electorales y que la última palabra recaerá en el Congreso, en lo que es percibido como un intento de pasar la página y quitarle las castañas del fuego a su gabinete.

El intento del mandatario de liberar a sus ministros opuestos a la pena de muerte del debate busca evitar que los medios de prensa aticen más la confrontación en el seno de su gobierno, donde surgieron voces disonantes.

“Yo creo que la sociedad necesita más rigor, más orden, y que los delincuentes necesitan sanciones mucho más severas, y ante el crimen atroz que es la violación seguida de asesinato de niños menores, creo que esa gente no tiene derecho a vivir”, dijo el mandatario el martes.

García ha dicho que no retrocederá y que su deber es impulsar la propuesta mediante un proyecto de ley o un referéndum.  

Ha insistido que Perú no tiene que denunciar pactos internacionales que excluyen la pena de muerte.

La esposa del presidente, la argentina Pilar Nores, se sumó al debate y respaldó la propuesta, pues ese tipo de delito se ha convertido en una especie de deporte ante la laxitud de las leyes, señaló con crudeza.

La polémica corre el riesgo de prolongarse durante varios meses y coincidir con las elecciones municipales y regionales de noviembre próximo, que podrían derivar en plebiscitarias.

Estadísticas policiales señalan el incremento de los casos de pedofilia. En el primer semestre del año los casos de violaciones a menores de edad llegaron a 1.464, de los cuales al menos tres acabaron en asesinato.

El presidente socialdemócrata, de 57 años, que ha dejado en evidencia su fe católica desde que volvió al poder el 28 de julio, ha negado que el tema sea una cortina de humo y subrayó que en Perú quedaron atrás los tiempos en que no se cumplían las promesas electorales en alusión a su antecesor Alejandro Toledo.

El ministro de Defensa, Allan Wagner, deslindó este sábado responsabilidades y señaló que el Congreso es el foro para discutir el tema. A su vez, trató de poner paños fríos al debate en el gobierno, indicando que “quienes somos sus ministros lo hacemos en el contexto de sus ofertas electorales”.

García quiere dar por terminado el tema, pero la propuesta sigue acaparando los programas de televisión, radio y la prensa escrita dando la impresión que la agenda gubernamental se ha reducido a dicho tema.

La propuesta encendió una polémica que parece de nunca acabar en un país donde la corriente principal del hombre de la calle estaría inclinada a favor de la pena capital como muro de contención a los pedófilos, mientras que una minoría lo acusa de populista y de querer ganar popularidad en las encuestas.

Abogados penalistas, sicólogos, siquiatras, criminalistas, legisladores, religiosos de diversas confesiones, periodistas, políticos, ministros y magistrados se han visto envueltos en el debate.

Perú abolió la pena de muerte en 1980, salvo en los casos de traición a la patria, razón por la cual es necesario una modificación constitucional para reinstaurar la pena capital.

Iglesia critica propuesta
Lima, (EFE).- El arzobispo de Lima, Juan Luis Cipriani, dijo ayer que “la Iglesia no defiende ni autoriza la pena de muerte” que propuso esta semana el presidente peruano, Alan García, para castigar a los violadores de menores que asesinen a sus víctimas.

El destacado miembro del Opus Dei en América Latina manifestó que el “Compendio del Catecismo” señala que “muy rara vez se debe acudir a esta alternativa para resolver un problema de la sociedad”, indicó un comunicado del Arzobispado de Lima.

La gestión de García, que asumió la Jefatura de Estado el pasado 28 de julio, cuenta con un 71,8 por ciento de aprobación y su propuesta de restablecer la pena capital ha generado un intenso debate en el país.

Los principales detractores de la medida, entre ellos los ministros peruanos de Exteriores y de Justicia y varios defensores de derechos humanos, consideran que ésta no resuelve el problema de los abusos sexuales y obliga a Perú a denunciar al tratado de San José de Costa Rica.

Sin embargo, organizaciones sociales como los Clubes de Madres y los comedores populares, junto a varios congresistas han exigido la pena capital contra los violadores de menores, que este año se han cobrado al menos unas mil víctimas en Perú, según el Ministerio de la Mujer y Desarrollo Social.

En este sentido, Cipriani subrayó que si bien “el sentir del pueblo es importante”, es “más trascendental” que “quienes gobiernan y legislan se dejen iluminar con más serenidad para poder estudiar estas cosas”, en alusión a las consecuencias de la pena capital.

El arzobispo de Lima también propuso la conformación de una Comisión de Urgencia, que no tenga carácter político, para investigar en el plazo de seis meses alternativas a la propuesta del restablecimiento de la pena de muerte, que prometió el político socialdemócrata durante la campaña presidencial de este año.

García anunció el martes que propondrá una reforma constitucional o un referéndum para que se castigue a los violadores y asesinos de niños con la pena capital, que sólo se aplica en Perú para el delito de “traición a la patria” en caso de guerra externa.

El cardenal peruano pidió al Estado evaluar su labor en las escuelas, municipios y tribunales para prevenir este delito sexual contra los menores y subrayó que el “gran desafío” de la sociedad peruana “es la educación moral”.

También rechazó la “mutilación porque la Iglesia no lo aprueba, ya que no somos dueños de nuestro cuerpo para mutilar a nadie”, en alusión a las propuestas de castración física y química como alternativas a la pena capital.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas