“A nosotros sí nos rinden los chelitos” Presidente Abinader.
Los datos de la realidad reportan que el gobierno Abinader ha entregado al país una impresionante relación de obras públicas -estoy obligado a resumir- que debe generar la admiración de todos, pues se han ejecutado en este tiempo de crisis global y de obligada reducción de los montos de inversiones.
Las grandes inversiones en infraestructura y servicios sociales y los subsidios para evitar que los altos precios afecten a todos se han podido realizar gracias a la eliminación del dispendio oficial, y el control por lo seco de la corrupción, que se estima en la actualidad ahorra al pueblo entre 60 mil y 70 mil millones de pesos por año, permitiendo al gobierno atender las necesidades de la gente.
Para continuar invirtiendo en la gente en este 2024, el gasto de capital será casi el doble que el del último presupuesto prepandémico, 2019, y por primera vez en la historia sobrepasará los RD$200 mil 920.6 millones, equivalente al 2.7% del PIB.
Entre otras obras que están transformando al país, hemos visto en días recientes las inauguraciones de la monumental entrada a Santiago por la autopista Duarte; habilitación de un importante tramo de la avenida Las Carreras, en Santiago; y la fabulosa transformación de la avenida Rafael Tomás Fernández Domínguez (San Isidro)
Inaugurada también la primera fase de La Ecológica, que enlaza al gran municipio SDE con la Autopista del Nordeste y las regiones Este y Nordeste, y con la Circunvalación de Santo Domingo, que lleva, entre otros destinos, a las importantes regiones Sur y Cibao.
Antes fue inaugurada la carretera que comunica a las provincias Valverde, Santiago Rodríguez, Dajabón y Montecristi, donde en Manzanillo se construyen facilidades para el desarrollo logístico de exportación y se levanta el enclave que creará la reserva fría energética que nunca hemos tenido.
Vimos inaugurar dos gigantescas obras de saneamiento, que benefician a cerca de dos millones de personas, con la conversión en parques ambientales, de diversión y deportes, lo que eran sendas cañadas en Cristo Rey, Distrito Nacional, y Gurabo, Santiago, que contaminaban y hacían vulnerables a decenas de barriadas populares.
Hemos visto al presidente Abinader entregar más de 7 mil soluciones habitacionales a familias que lo necesitaban, la mayor cantidad de viviendas que haya entregado gobierno alguno en dos años.
Vemos la inauguración de esas y muchas otras realizaciones que están cambiando el país, de las que sólo el ministerio de Obras Públicas sobrepasa las 315 grandes obras, sin mencionar cientos de estructuras medianas y pequeñas.
Y que, además, el gobierno ha sembrado el país de acueductos, centros de salud, escuelas, politécnicos, extensiones de la UASD, estancias infantiles, ampliaciones de las líneas del metro, sistema ferroviario de monorriel y de teleférico en Santiago, y en Los Alcarrizos; puertos, aeropuertos, muelles logísticos y pesqueros y muchas otras.
Todas esas obras, y las que faltan por mencionar se han materializado pese a que el presidente Abinader ha debido invertir enormes recursos para permitirnos salir lo mejor parados posibles del Covid, subsidiar a los pobres y evitar que los altos precios de los combustibles, los insumos y mercancías importadas y el transporte desataran altos niveles de inflación, como los que afectan a otros países, y mantener al día la deuda pública histórica, que ha logrado bajar como proporción del PIB.
Sólo en este año, conforme una historia de Carmen María Guillén, de Diario Libre: “El gasto en subsidios para mitigar la inflación aumentó un 112.5 %”, elevándolo “a RD$132 mil 482 millones entre enero y el 8 de diciembre”.
Esteban Rosario, el combativo comunicador de Santiago, documentó en un reciente video, citando datos del Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, las cuantiosas inversiones hechas por el gobierno en todo el territorio nacional.
Rosario resumió que el presidente Abinader termina 2023 aprobando mil 207 proyectos de inversión con un total de 133 mil millones de pesos.
Sólo en la Región Ozama, que incluye la provincia Santo Domingo y el Distrito Nacional el gobierno aprobó 158 proyectos de inversión a un costo de 42 mil 600 millones de pesos.
En las 14 provincias del Cibao fueron aprobados 491 proyectos con un valor de 53 mil 600 millones de pesos.
En la región Este aprobó 250 proyectos de inversión con valor de 17 mil 400 millones de pesos y para las provincias del Sur, fueron aprobados 300 proyectos de inversión de 21 mil 500 millones.
“Nunca un presidente de la República había invertido tanto dinero en las provincias del país”, comenta admirado Esteban Rosario, probablemente no recordando que uno de los principales compromisos de Abinader en su programa de gobierno fue el de invertir los recursos estatales en el territorio donde vive la gente, dejando atrás la discriminatoria política de otros presidentes que concentraron el gasto público en la capital.
Es importante resaltar que 687 proyectos de inversión pública distribuidos en las formulaciones de los años fiscales 2022, 2023 y 2024 han pasado por consejos de desarrollo provinciales, democratizando y diafanizando la participación de la sociedad en la distribución del presupuesto en todo el territorio nacional.
Sólo en la Ley núm. 80-23 de Presupuesto General del Estado 2024 se contemplan 182 proyectos de inversión pública, con un monto ascendente a RD$8,599.4 millones, resultado de los Consejos de Desarrollo en 31 provincias del país.
Para coronar su determinación de llevar la mano amiga del gobierno a todas las zonas del país, de manera justa y transparente, Abinader acaba de inaugurar en Cabo Rojo la primera fase de un muelle turístico y un conjunto de obras que darán al Sur la oportunidad de desarrollarse como la Costa Norte, con Puerto Plata; y el Este, con Punta Cana.