Donald Rowland Francis 
El sostenido crecimiento en el flujo de turistas que llegan a la República Dominicana es un claro indicio de la consolidación de este sector como fuente primaria de sostenibilidad de la economía, ahora que se otean claros indicios de una real y continuada diversificación de esta oferta.
Las últimas cifras ofrecidas por la Asociación de Hoteles y Turismo de la República Dominicana (Asonahores), confirman esta tendencia al señalar que en enero de este año arribaron 465,229 turistas que contrastados con los 435,851 del 2015 representa un 6.74% de incremento.
La diversificación de la oferta turística en un área tan sensible como el gastronómico viene recibiendo el apoyo de instituciones como el Centro Cultural Gastronómico Casa Caribe mediante la valorización de los productos nacionales, la recuperación del recetario tradicional a través del registro fotográfico de Rosa María Gómez (La Chefa).
La valorización de la cocina dominicana se consolida con la próxima apertura del Centro Superior Hostelería Mediterráneo, un centro educativo que viene a ofertar una gama de posibilidades de aprendizaje con la más amplia selección de cursos de cocina desde el nivel básico al avanzado, máster y postgrado certificados internacionalmente.
La formación de nuestro recurso humano es uno de los valores necesarios para el desarrollo de una alta cocina dominicana, como eje fundamental que valoriza a los productos locales, elevando los estándares de calidad y fortalecimiento en la formación técnico profesional de sus actores principales.
Sin lugar a dudas, el gastronómico es el sector primordial en el camino hacia una real diversificación de la oferta turística dominicana que además cuenta con un amplio y variado universo de virtudes que trascienden la tradicional propuesta de sol, playa y arena que es la más explotada en el país en la actualidad.
