El ex-embajador ante la Organización de Estados Americanos (OEA) Gedeón Santos presentó sus memorias donde detalla los logros que según él, fueron alcanzados bajo su gestión.

En un documento titulado “Rindiendo Cuentas” se destaca como logro trascendente «el haber sacado al país (en tiempo récord) del odioso capítulo IV-B donde nos metiera la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) bajo la acusación de violadores sistemáticos de los derechos humanos a raíz de la sentencia 168-13 del Tribunal Constitucional».

Así mismo, se pone de relieve en el informe «la creación de un nuevo modelo de gerencia diplomática basado en una plataforma tecnológica en la que se incorporó la firma y el sello digital, el concepto de paperless y el uso de las redes sociales como instrumento de trabajo”. También, “se desarrolló el modelo de oficina abierta y horizontal, se estimuló el trabajo a distancia y se creó un sistema de archivo en la nube».

En las memorias se destaca como importante la mediación de la República Dominicana ante el conflicto de Venezuela «donde el país fue foco de atención mundial y objeto de elogios de parte de la comunidad Internacional».

Se resalta también la excelente relación con el secretario general de la OEA Luis Almagro,“cuyo acercamiento permitió un positivo cambio de actitud hacia la política migratoria y de derechos humanos que pasaron de acusarnos de prácticas de apatridia a presentar al país como un modelo regional en políticas migratorias”.

Cita, además, la decisión unánime del Consejo Permanente de ponerle el nombre del patricio Juan Pablo Duarte a un Salón de la OEA, “con lo cual se unió el nombre de nuestro libertador al de muchos connotados personajes continentales cuyas esfinges también adornan otros salones de la institución hemisférica”.

En ese orden, destaca el documento de rendición de cuentas la decisión del secretario general de la OEA Almagro de declarar el merengue como patrimonio cultural de Las Américas “con lo cual se puso nuestra música en el más alto sitial de la cultura americana”.

Según el ex-embajador Santos, “un logro importante fue la remodelación de todos los espacios físicos de la Misión, los que además fueron dotados de los más modernos equipos de oficina y de tecnología, lo que permitió optimizar el trabajo en la referida Misión Permanente”. También establece que “se rotularon todos los espacios de la Misión, se dotó al personal de computadoras personales, se creó la galería de los embajadores dominicanos ante la OEA, se estableció el premio anual al empleado del año y se eficientizó notablemente la tramitación de documentos a Cancillería”.

Finalmente, en el referido documento el ex-embajador dio las gracias al Presidente Danilo Medina, al Canciller Miguel Vargas Maldonado, a todo el personal de la Misión y a su esposa Ana Báez por el apoyo brindado a lo largo de toda su gestión.

«Agradezco al presidente Danilo Medina por haberme dado la oportunidad de servir al país en un organismo tan complejo como la OEA, por haberme permitido poner mis conocimientos al servicio de la patria y por otorgarme el privilegio de defender en esa Institución hemisférica los valores que aprendí del profesor Juan Bosch.”