Cuando se trata de estilizar el cabello rizo y crespo, darle definición y mantenerlo “amoldado” por más tiempo existen muchas opciones de productos que pueden hacernos la vida más fácil por unos segundos, pero que a la larga terminan resecando y maltratando nuestro pelo.

Buscando una alternativa a estos productos comerciales, quería algo que fuera económico, fácil de hacer y efectivo. Al final encontré en la internet lo que andaba buscando: la receta del gel de linaza.

La semilla de la planta Linum Usitatissimum, mejor conocida como Linaza, es utilizada para la cura y prevención de múltiples enfermedades. Por su alto contenido en fibra se utiliza para bajar de peso, también para controlar el estrés y como antioxidante y muchos otros maravillosos usos.

Últimamente la linaza también es usada para el cabello en forma de un gel que se aplica tanto para nutrir el cabello, como para darle definición, humectación y brillo, sustituyendo las gelatinas y espumas.

¿Cómo se hace?  Vierta en una olla ¼ taza de semillas de linaza, las cuales puede adquirir en el supermercado, agregue a esto tres tazas de agua y deje hervir por diez minutos.

Colar y agregar media cucharadita del aceite de su preferencia (yo utilizo el de oliva o el de coco). Deje enfriar colóquelo en un envase con tapa y utilícelo de la misma manera que usaría una gelatina para el cabello. Notará que a medida que se enfría pasa de consistencia líquida-viscosa a un gel casi firme.

Este gel se puede mantener en la nevera por aproximadamente una semana o más dependiendo de los ingredientes adicionales que podamos agregarle.

He encontrado infinidad de opciones para hacer esta receta: se usa agua de rosas, romero, clavos dulces, miel, menta, y un sinfín de ingredientes más que la gente agrega a su gusto y medida, usted pruebe con el ingrediente que se sienta más cómoda y disfrute de esta maravilla natural con una receta que nos da muchos beneficios con pocas complicaciones.

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