Si los hombres que ejercen violencia contra la mujer son violentos por una condición genética, entonces la lucha social habría que abandonarla y nada tendría razón de ser. Lo que establecen los estudios es que se trata de una conducta aprendida, dijo ayer la psicóloga social franco-colombiana Florence Thomas.

La violencia es cultural y es aprendida; si fuera genética, ¿qué valor tiene la rehabilitación y el trabajo de los profesionales y activistas sociales?, insistió Thomas “Los hombres son violentos porque han sido educados en una cultura violenta, si fuera genético sería un desastre, pero no es que los hombres sean violentos, es que hay violencia contra las mujeres, ese es el tema”, insistió la estudiosa franco-colombiana.

A su juicio, la violencia es cultural, llega por los medios de comunicación, por el discurso del cura del barrio, “por las inmundas telenovelas colombianas, esa es la cultura violenta que cae contra las mujeres” y que debe ser cambiada. La psiquiatra puertorriqueña Rose Emily Nina Estrella insiste, sin embargo, en que es necesario investigar más, pues es justamente la neurología la que más ha aportado a la hipótesis de que el hombre es violento por una condición genética.