SAO PAULO. AFP. General Motors (GM) de Brasil despidió a un nuevo grupo de trabajadores en una de sus plantas de Sao José dos Campos, en el estado de Sao Paulo, y anunció el cierre de una cadena de montaje.

«Según el acuerdo del 28 de enero de 2013 con el sindicato de los metalúrgicos, GM comunica el cese de las actividades en la cadena de montaje de vehículos de pasajeros a fines de diciembre de 2013», indica el comunicado.

«A fines de julio de 2012, con el fin de la producción de los modelos Corsa, Meriva y Zafira, la continuidad de las operaciones de la fábrica de automóviles ya no era viable», explica el comunicado.

Antonio Ferreira Barros, presidente del sindicato, amenazó con llevar el caso ante la justicia porque según él GM violó el acuerdo al cerrar la cadena de montaje.

GM no especifica la cantidad de empleados que despidió pero según el sindicato, la dirección se refería a un exceso de 450 trabajadores.

Las cartas que comunicaban los despidos a partir del 31 de diciembre empezaron a llegar este sábado a los domicilios de los obreros que estaban de vacaciones colectivas, informó este domingo el sitio de noticias G1.

Se trata de la segunda tanda de despidos masivos en la fábrica de Sao José dos Campos. En marzo, GM había despedido a 598 trabajadores. A ello se suma que GM inició en octubre un programa de retiro voluntario al cual se adhirieron 300 empleados.   En total, más de 1.000 trabajadores fueron despedidos en 2013, según G1.

En su comunicado, GM subraya que desde el 2008 «negoció en vano con el sindicato nuevas inversiones que habrían permitido la aprobación de nuevos proyectos para la planta».

La empresa destaca en cambio haber optado por nuevos proyectos previstos, por unos 5.700 millones de reales (2.500 millones de dólares) para otras fábricas que posee en el país: en Sao Caetano do sul (Sao Paulo) y Gravatai (Rio Grande do sul, sur) en fase de modernización.

GM indica además que construye un nuevo complejo en Joinville (Santa Catarina, sur) para fabricar motores y adelantó inversiones en las plantas de Mogi das Cruzes (Sao Paulo) y Sorocaba (Sao Paulo).

GM confirmó asimismo que su complejo industrial en Sao José dos Campos seguirá funcionando junto con otras siete fábricas.

En los últimos dos años, el sector industrial eliminó más de 200.000 puestos de trabajo, según el instituto brasileño de geografía y estadística (IBGE, público).