Hoy 
POR MARGARITA QUIROZ
Cinco de estos seis jóvenes llegaron al país cuatro meses antes de la tragedia que borró por completo el barrio de Las 40, en Jimaní. La convicción de ser misioneros les motivó a un cambio de vida. Simplemente, abandonaron todo… familia, amigos y, por supuesto, la comodidad de las grandes ciudades para internarse en lo profundo del empobrecido Sur de la República Dominicana.
Partieron de Estados Unidos, Japón y Chile. Kimberly Beers, Kyoko Obayashi, Taisi Fusisaki, Magdalena Rojas, Macarena Basualto y Eduardo Lobo, de forma individual, archivaron en sus respectivos disco duro mental los conocimientos adquiridos por años de estudios, tomaron una mochila y con sólo lo necesario emprendieron como aventura el bello ejemplo de ayudar a los demás.
Hoy día viven en armonía familiar como sí se hubiesen conocido toda una vida y en lugar de comer sushi, hamburguesa o curanto, optan por un plato de arroz, habichuela y carne. No cuentan con televisor ni otra forma de entretenimiento; sin embargo, disfrutan su nueva vida, tanto así que ya saben bailar bachata.
Su mundo es otro. Antes hablaban de desarrollo y preservación del medio ambiente en una lujosa oficina, y ahora se sientan en una enramada con los campesinos de las diferentes localidades de Padre Las Casas, Azua, Pedernales, Elías Piña, Duvergé y Jimaní con el interés de buscar fórmulas para mejorar la calidad de vida de estas humildes personas.
Cada uno de ellos realiza un trabajo diferente, pero bajo el enfoque integral de lo que es el desarrollo y para su ejecución enfatizan en áreas como la salud, educación, gerencia de ingresos, gestión comunitaria e infraestructura.
Por ejemplo, los japoneses Kyoko Obayashi y Taisi Fusisaki así como los chilenos Eduardo Lobo y Macarena Basualto trabajan en el Proyecto de Manejo de las Cuencas Altas de la Presa de Sabana Yegua, el cual tiene como objetivo la recuperación y conservación de los recursos naturales de las cuencas de los ríos Yaque del Sur, Grande del Medio y Las Cuevas, incluyendo sus afluentes. Este proyecto cuenta con un Plan Maestro que contiene todos los aspectos técnicos a ejecutarse para el manejo de las referidas cuencas en un período de 15 años.
El Plan Maestro fue elaborado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, en colaboración con la Agencia de Cooperación Internacional del Japón (JICA) con una inversión de 4.5 millones de dólares y actualmente está en su segundo año de ejecución.
Dentro de las actividades propias para la recuperación de los recursos naturales, el proyecto incluye el manejo forestal, agroforestería, conservación de suelos, incendios forestales, desarrollo comunitario, refuerzo de organización comunitaria, extensión y capacitación y personal de apoyo.
El proyecto abarca un área geográfica de 1.600 kilómetros cuadrados e incluyen los parques nacionales José del Carmen Ramírez y Reserva Científica de Valle Nuevo, que benefician directamente a unas 159 comunidades en todo el territorio.
Para la ejecución de este proyecto, el Gobierno dominicano designó a la Fundación Sur Futuro a través del decreto número 663-02, del 22 de agosto de 2002.
Además, estos cuatro jóvenes llevan a cabo un programa de reforestación en Padre Las Casas a través del cual se establecieron 42 nuevas parcelas, 4 viveros comunitarios, 34 huertos caseros mixtos y están implementando el programa agroforestal en cuatro comunidades bajo el Fondo Canadiense para las Iniciativas Locales de la Embajada de Canadá.
La chilena Magdalena Rojas trabaja junto a la estadounidense Kimberly Beers en el proyecto de Centro de Lectura Amaury Germán Aristy en donde se le ofrece los materiales necesarios (libros, espacios de juego, computadoras, clases de pintura, juego de reglas) a niños, adolescentes y jóvenes de Padre Las Casas. El interés es mejorar la oferta y calidad de la educación básica y garantizar el acceso de analfabetos a procesos no formales de alfabetización de adultos.
Rojas también trabaja en el programa de Microcrédito para impulsar proyectos de empresas de base tecnológica y de oficios, apoyar pequeñas empresas en subsectores productivos específicos y estimular el interés de las personas para que inicien su propia actividad empresarial. Hoy día, han resultado beneficiados nueve microempresarios propietarios de colmados, salón de belleza, fábrica de queso y demás.
Todo esto son varios proyecticos que van enriqueciendo el gran proyecto y todo esto forma parte del Plan Maestro, excepto el proyecto de biblioteca, dice Melba de Grullón, creadora de la Fundación Sur Futuro.
Los jóvenes japoneses trabajan conjuntamente con Sur Futuro a través de la Agencia de Cooperación Internacional de Japón (JICA). La estadounidense representa al Cuerpo de Paz y los tres chilenos a América Solidaria y la Embajada de Chile.
SUR FUTURO
La Fundación Sur Futuro es una organización no gubernamental sin fines de lucro, que promueve con visión de futuro, el desarrollo y el bienestar social de las comunidades de la región sur.
Su creadora es una sensible mujer, Melba de Grullón, que independientemente de haber nacido en Padre Las Casas, vive en carne propia las penurias que pasan día a día los sureños.
Su norte es ayudar a estas personas y una muestra es el trabajo que realizan hace tres años en Sur Futuro. Conoce cada rincón de la región Sur, su gente, su sentir, por eso al preguntársele sobre la tragedia de Jimaní, tan solo pudo pronunciar la primera sílaba de esa sufrida comunidad, e inmediatamente su voz se quebró y las lágrimas brotaron de sus ojos.
