EDUARDO KLINGER PEVIDA
Durante este año del 2007 que ya se opaca  ha resultado más evidente que nunca la pertinencia de visualizar el problema energético que hoy enfrentamos con una visión geopolítica. No hacerlo así puede dejarnos en muy mala posición para tomar decisiones acertadas que puedan colocar a la República Dominicana en un contexto realista para estructurar una política de desarrollo a largo plazo.

 Por ello, la convocatoria y organización de una Semana Internacional de Energía en Santo Domingo en los primeros días de enero del 2008 – del 14 al 18 – deviene en una iniciativa ingeniosa, además de oportuna. La masiva y muy alto nivel de respuesta obtenido tanto de gobiernos como de expertos internacionales y empresas de gran ranking mundial habrán de colocar a la República Dominicana en el centro de atención geopolítica.

No comprender de que un escenario internacional con precios altos del petróleo y una realidad geo – estratégica mundial que seguirá presionando al alza esos precios resultaría en una gran negligencia e irresponsabilidad.

 China Popular e India van a seguir registrando altas tasas de crecimiento y, consecuentemente, demandando mayores insumos de hidrocarburos lo cual continuará provocando un desequilibrio entre oferta y demanda que mantendrá los precios altos.  A esa realidad hay que agregar la realidad de las tensiones, tambien geopolíticas, en áreas de incidencia decisiva para la oferta de petróleo como es el Oriente Medio.

 Precios altos del petróleo han estimulado la búsqueda de alternativas de generación que contribuyan a reducir la demanda y con ello a retrotraer los precios. Reacción inteligente pero peligrosa.  No se puede perder la capacidad de visualizar la racionalidad económica y tener presente que lo que puede ser hoy viable económicamente con precios del petróleo por encima de los 80 y los 90 dólares el barril pueden no resultar rentables tan solo con una reducción moderada de esos precios.

 Hay una fiebre por el uso del etanol y otros biocombustibles que ya están teniendo otro efecto indeseado: la elevación de los precios de muchos productos alimenticios.

 Nadie puede abrigar dudas de que el camino orienta, indefectiblemente, a estructurar una estrategia sustentada en la utilización de un gran menú de opciones; o sea, el uso de diversas fuentes alternativas y esencialmente renovables para garantizar que sean de largo plazo.

 Efectivamente, esas opciones son las que hay que visualizar.

 La realización de un gran evento – la Semana Internacional de la Energía – que aglutine en espacio y tiempo intelectualidad – expertos de alto nivel -, tecnología de punta – empresas – y experiencia – gobiernos – es una respuesta con visión geopolítica al desafió energético que enfrentamos.

 El programa de Conferencias Magistrales ya garantizado durante la celebración de la actividad nos permite el acceso de primera mano a lo último que esta disponible en el mundo desde el punto de vista de los estudios sobre fuentes alternativas tradicionales y nuevas, eficiencia y versatilidad en el uso de la energía. A su vez, la exposición de equipos y otros productos, así como de servicios, que presentarán en la actividad ferial las empresas internacionales que van a concurrir, permitirán que nuestras autoridades y el sector empresarial puedan apreciar las opciones mas avanzadas en el mundo de hoy día.

 Varios países van a presentar experiencias nacionales – por vía de Ministros, expertos o empresarios privados – en el uso de fuentes alternativas, renovables y en el ahorro y la eficiencia. Es el caso de presentaciones de España, Venezuela, Estados Unidos, Costa Rica, Cuba, la Unión Europea y otros.

Desde ya se puede esperar que del marco del evento salgan acuerdos de cooperación intergubernamentales, algunos de ellos ya negociados o en proceso de negociación. Un caso significativo es el de Cuba, país del que se recibirá colaboración para la prospección geológica aprovechando una experiencia nacional que le ha permitido llegar a autoabastecerse en alrededor de un 70 % de sus necesidades nacionales de petróleo.

 De las experiencias que se presentaran de utilización de alternativas eficientes en pequeños territorios y micro proyectos económicos en Estados Unidos, España, Costa Rica y otras naciones seguramente saldrán múltiples opciones de acuerdos ya sea por  vías contractuales comerciales o de colaboración.

 El país ha ideado una formula de inserción novedosa y exitosa para hacer frente a la realidad geopolítica del desafío energético.