Cada visita de Gilberto Santa Rosa al país es como el regreso de uno de los nuestros. Él mismo afirma que su relación con los dominicanos “ya dejó de ser una relación artista-público. Es una cuestión un poco más personal”.

Ya sea porque lleva años compartiendo su música en el país, porque está casado con la dominicana Alexandra Malagón, o porque tiene nuestra nacionalidad, el artista -que regresa con su concierto “El amor en tiempo de salsa” el 21 de agosto en el anfiteatro Nuryn Sanlley-, se siente feliz por la especial relación que ha cultivado en la isla.

El “Caballero de la Salsa”, quien aprovechará este concierto para celebrar junto a sus fans sus 39 años como cantante y 53 de vida, compartió con la prensa la mañana de ayer algunos detalles sobre este concierto.

“La estrella del show es la música y la gente” expresó el salsero, quien adelantó que aunque el espectáculo lleva por nombre “El amor en tiempo de salsa”, no se puede bajar del escenario sin interpretar otros géneros.

Mismo fenómeno. Santa Rosa resaltó el crecimiento que ha tenido la industria salsera en el país, y comparó el fenómeno que está pasando con los salseros dominicanos con lo que pasó en Puerto Rico cuando los artistas boricuas también sintieron la necesidad de hacer su propio merengue.

“Igual que pasó el fenómeno de los años 80 en Puerto Rico, donde el 90 % de la programación de la radio era merengue hasta que llegó el fenómeno del merengue boricua, pasa algo similar con la salsa hecha por estos muchachos jóvenes y veteranos ‘guillaos’ de jovencitos”, explicó el cantante.