Hoy 
PEDRO BLANDINO
Todo dominicano bien nacido, lo que es igual, que se sienta heredero de la sublime mística patriótica de Juan Pablo Duarte, no puede ni debe negar su aporte a la construcción de un clima de gobernabilidad en estos tiempos que corren.
Y debemos pensar que la falta de gobernabilidad ha sido la causa de todas las vicisitudes nacionales.
Sería muy extenso enumerar y mucho más analizar las causas de nuestras dolorosas caídas a lo largo de nuestro accidentado desarrollo histórico.
En consecuencia, focalicemos este enfoque hacia la urgencia de gobernabilidad en medio de la actual circunstancia histórica.
Comencemos señalando que la gobernabilidad presenta una gran diversidad de facetas, pero las dos principales son estas:
a) Que el gobierno de turno pueda cumplir una función creadora para beneficio de los intereses superiores de todo nuestro espectro social y
b) Que exista un fenómeno de armonía y de convergencia de metas en torno al engrandecimiento de la patria entre el Poder Ejecutivo Legislativo, Judicial, Municipal y esa fuerza emergente bautizada con el nombre de «Sociedad Civil».
Pienso en estos momentos en que la actitud del Consejo Presidencial del Partido Reformista puede y debe hacer una hermosa y decisiva contribución a la estructuración de una consensuada y concertada gobernabilidad que empezaría ahora y que se mantendría en el curso de los años por porvenir.
La gobernabilidad es la mejor garantía de la vigencia del sistema democrático como forma y estilo de gobierno y como diseño de convivencia pacífica. Si creamos la gobernabilidad, que siempre fue sueño del más grande líder político dominicano de todos los tiempos, Joaquín Balaguer, evitaríamos el colapso de los partidos políticos como raíces y troncos de una continuidad democrática fértil y armoniosa.
En definitiva, compartimos plenamente la voluntad del Presidente de la República, doctor Leonel Fernández, que debemos balancear y equilibrar la correlación de fuerzas en el Congreso para posibilitar el brote fecundo de una gobernabilidad que sea respuesta y solución a las demandas sociales y todas las urgencias nacionales.
