El Gobierno debe evitar conflictos con el Colegio Médico Dominicano

En las actuales circunstancias de salud que padece el pueblo dominicano el Gobierno debe evitar, por todos los medios cualquier tipo de conflicto con el Colegio Médico Dominicano, cuyo presidente, Waldo Ariel Suero, se ha lanzado a una huelga de hambre, junto a un grupo de galenos en la sede del Ministerio de Salud Pública, en protesta por la cancelación de 50 miembros del gremio, algunos con más de 20 años de servicios públicos.

El dirigente gremial ha sostenido conversaciones hasta con el Presidente de la República a fin de que a los cancelados se les repusiera en sus posiciones de base, es decir en sus respectivas especialidades, dejando de lado los cargos administrativos transitorios que ocuparon en los gobiernos pasados, según el doctor Suero quien insiste en defender a sus colegas al margen de las ideas o posiciones políticas partidarias que puedan sustentar.

Entre los cancelados hay profesionales como la doctora Julia Elisa García, de 65 años de edad y 40 laborando en hospitales públicos, 24 como médico de base. También se cita el caso de la doctora Elsa Valdez, epidemióloga petromacorisana con 29 años de servicios en el Ministerio de Salud, quien alega vivir en estado de indigencia desde su cancelación, sin casa propia, sin dinero y familia que mantener, para solo citar dos casos.

Considero que luego de 6 meses de conversaciones con las principales autoridades del Gobierno en el área de la salud, incluyendo al Presidente y la vicepresidenta de la República, debió buscarse una solución satisfactoria a favor de ese grupo de profesionales tan necesarios en las actuales circunstancias de pandemia que vive el país.