Gobierno dispuesto a mediar para solucionar conflicto empresarios-trabajadores

Gobierno dispuesto a mediar para solucionar conflicto empresarios-trabajadores

El vicepresidente de la  República, Rafael Alburquerque, expresó anoche su disposición de mediar para solucionar el conflicto existente entre la dirigencia sindical del país y los empresarios, en cuanto al monto del aumento salarial para todos los trabajadores, mientras que el presidente de Consejo Nacional de Unidad Sindical, Rafael Abreu, responsabilizó a los empleadores de lo que pudiera  ocurrir como resultado de las protestas y huelgas que se escenificarían.

El titular del Poder Ejecutivo, ante la ausencia del presidente Leonel Fernández, manifestó su esperanza de que se solucione el conflicto que separa a la dirigencia sindical del país con los empresarios.

 “Bueno yo creo que habrá que hacer los esfuerzos necesarios para que este diálogo se reanude”, manifestó el vicepresidente de la República.

En  tal sentido, se puso a la disposición de las partes en conflicto para servir como mediador  y que el diálogo  entre las centrales sindicales y los empresarios por alcanzar un aumento general de salarios se reanude.

Recordó que la concertación y el dialogo en el país ya es una cultura desde el año 1985, y reconoció que siempre hay diferencias que al final se resuelven.

El vicepresidente Alburquerque habló al compartir un coctel que ofreció a obreros y dirigentes sindicales en el Salón Verde del Palacio Nacional, donde se dio a conocer el decreto presidencial 277-11 que pensiona a 15 dirigentes y obreros sindicales con 25 mil pesos mensuales a cada uno, lo que entiende es un reconocimiento al trabajo que los dirigentes y obreros sindicales han realizado en beneficio del país y la clase obrera.

En tanto que para Abreu, representante de los trabajadores, es ridícula la propuesta del 11.58 por ciento de incremento al salario mínimo que ofrecen los empresarios, razón por la que no acudieron a la reunión del Comité Nacional de Salarios, pautada para ayer, y advirtió que no volverán hasta que no haya algo razonable.

Los trabajadores exigen  un alza de un 30 por ciento,  para el salario mínimo, y de 25 por ciento,  para quienes ganan hasta 50 mil pesos.

En tanto que el Ministro de Trabajo, Max Puig, se mostró optimista en que ambas partes llegarán a un acuerdo, y anunció que el próximo martes convocará nueva vez al Comité Nacional de Salarios a una reunión que podría realizarse en las próximas dos semanas.

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