El gobierno de Barack Obama propuso reducir las emisiones de metano que despiden los procesos de producción de petróleo y gas en casi la mitad en la próxima década, en una medida sin precedente para controlar el cambio climático.
El objetivo consiste en reducir la emisión de metano de las perforaciones del petróleo y el gas del 40% al 45% para el 2025, en comparación con los niveles del 2012. La medida no fue inesperada ya que las autoridades habían establecido esa misma meta en un plan preliminar en enero.
Pero al llevar adelante la propuesta oficial, el presidente Obama agrega una más a la lista de regulaciones energéticas que han sido elogiadas por los ambientalistas y vituperada por los promotores de la energía.
Para cumplir con ese objetivo, se anticipa que el gobierno emitirá las primeras regulaciones nacionales para reducir las emisiones de los pozos nuevos de gas natural, como también nuevas normas de perforación para reducir las filtraciones de los pozos en terrenos públicos.
No está claro cuánto costará a la industria energética cumplir con dichas normas. La Agencia de Protección Ambiental programó un anuncio al mediodía del miércoles para revelar la propuesta.
“Hoy, mediante nuestras normas propuestas, ponemos de manifiesto nuestro compromiso a reducir la contaminación que impulsa el cambio climático y a proteger la salud pública a la vez que apoyamos un desarrollo responsable de la energía con transparencia y rendición de cuentas”, dijo la administradora de la agencia Gina McCarthy en una declaración.
Se anticipa que el gobierno finalizará las reglas el año próximo poco antes de que Obama complete su mandato.
El metano, componente clave del gas natural, tiende a filtrarse durante la producción de petróleo y gas. Aunque apenas incide en las emisiones de gases contaminantes en Estados Unidos, es mucho más poderoso que el más prevaleciente anhídrido carbónico para atrapar el calor en la atmósfera. Eso hace que los ambientalistas pongan hincapié en el control del metano.