MADRID (AFP).- El gobierno lanzará en enero de 2006 un plan de control y lucha integral contra las bandas juveniles latinas que han empezado a emerger en España, así como contra las organizaciones españolas de extrema-derecha y de extrema-izquierda.
El objetivo del plan es la prevención de la aparición o consolidación de grupos violentos de carácter juvenil y cuando sea necesario la detención y la neutralización de este tipo de bandas, señaló el jueves el ministro del Interior español, José Antonio Alonso.
El ministro explicó en rueda de prensa que el plan, que se aplicará en dos fases a partir de enero próximo hasta diciembre de 2007, establece tres tipologías de bandas que son de extrema-derecha, de extrema-izquierda y las latinas, con miembros cuyas edades varían entre los 12 y los 32 años.
Alonso no especificó si habrá refuerzo de efectivos policiales, pero señaló que se pondrá a trabajar en el plan a todos los grupos de menores de la policía y la guardia civil.
El fenómeno de estas bandas en España es un problema emergente y creciente al que hay que dar respuesta, añadió el ministro, quien aseguró que el plan responde a la creciente preocupación de los ciudadanos especialmente en las grandes ciudades como Madrid y Barcelona y en el este de España.
Alonso señaló que las bandas latinas con mayor implantación en España son los Latin King, las Latin Queens y los Ñetas, algunos de cuyos máximos dirigentes se encuentran en prisión, pero el 80% de sus miembros son menores de edad penal.
Los Latin King tienen 15 jefes en distintas ciudades, están identificados y algunos en prisión, dijo el ministro, quien añadió que sus miembros están obligados a pagar un canon al mes a sus jefes para hacer frente a los gastos de abogados.
Las bandas latinas han sido el objetivo principal durante 2005 de la actuación de la policía nacional, que ha identificado a 1.855 miembros de estos grupos y ha detenido sólo en Madrid y Barcelona a 94 jóvenes vinculados a estas bandas, según un comunicado del ministerio del Interior.
En total, a lo largo del año, las autoridades españolas han detenido a 300 miembros de bandas tanto latinas como de extrema-izquierda o de extrema-derecha, e identificado a 2.000 de sus miembros, señaló el ministro Alonso, quien abogó también por la aplicación de medidas de concienciación y educativas junto a las policiales.
El plan pondrá una atención especial a la recogida de información y se estructurará en torno a una serie de puntos principales empezando por la confección de planes de seguimiento de estas actuaciones delictivas.
Se elaborarán mapas específicos de riesgo (para ver donde se da más el fenómeno), se intensificará la presencia preventiva de la policía en las zonas de riesgo y las actuaciones encubiertas y se elaborará un protocolo común para la definición de lo que es un hecho criminal asociado a banda juvenil, dijo el ministro.
Alonso detalló que también se controlará la situación administrativa de sus miembros, lo que podría suponer la aplicación de la ley de Extranjería, incluida la expulsión, para aquellos miembros de bandas, principalmente latinas que se encuentren de manera irregular en España.
El ministro puso especial énfasis en el intercambio de información con los países latinoamericanos, asegurando que ya ha habido contactos con países del centro y del sur de América (Latina) tanto a nivel de relaciones políticas como de relaciones operativas entre las diferentes policías.
El fenómeno de las bandas juveniles, especialmente las latinas, ha surgido con fuerza en los últimos tiempos en España donde hasta noviembre de este año murieron tres jóvenes en acciones vinculadas a estos grupos.