Fuentes vinculadas al manejo de las finanzas públicas dijeron anoche que en ningún momento el Gobierno autorizó al Banco de Reservas a conceder préstamos  a ingenieros y firmas que construyen obras públicas. Por lo tanto, observaron, el “colapso” o caída del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional nada tiene que ver con el aumento del crédito interno más allá de lo convenido con el organismo internacional, como se dijo en una crónica publicada ayer por este diario. 

 Los créditos que el Banco de Reservas ha concedido a contratistas son transacciones ordinarias que están respaldadas por la solvencia económica y financiera de los solicitantes. Comentaron las fuentes que se ha tratado de préstamos que todos los bancos hacen a sus clientes, porque ese es su negocio. Se reiteró, sin embargo, que el FMI y el Gobierno no lograron un consenso sobre el sensitivo tema del aumento de la tarifa eléctrica, un reclamo del Fondo. A finales del año pasado el economista Bernardo Vega adelantó la posibilidad de una caída del acuerdo, y mencionó el tema eléctrico y el aumento del crédito interno.