POR MANUEL JIMÉNEZ
El presidente Leonel Fernández anunció ayer que este año el gobierno buscará una segunda planificación de sus obligaciones con el Club de París, así como nuevos financiamientos con la banca privada local, para garantizar los recursos a corto plazo que ayuden a mantener un presupuesto balanceado.

Fernández dijo, igualmente, que en esta estrategia gubernamental está también el objetivo de realizar una reestructuración del pago de los bonos externos que totalizan US$1,100 millones y una reprogramación de la deuda con los bancos comerciales y suplidores extranjeros.

Estos fueron algunos de los compromisos que asumió la  República Dominicana con la reprogramación de sus pagos a los gobiernos que integran el Club de París.

“En lo que respecta a la falta de recursos a corto plazo para tener un presupuesto balanceado, el gobierno tiene como objetivo realizar una reestructuración del pago de los bonos externos, una reprogramación de la deuda con los bancos comerciales y suplidores, una nueva planificación de sus obligaciones con el Club de París en el 2005 y la obtención de un nuevo financiamiento con la banca privada local”, dijo Fernández.

El gobernante tocó el tema en la parte en que defendió el reciente acuerdo firmado por el país con el Fondo Monetario Internacional, FMI, durante su comparecencia ante la reunión conjunta del Senado y la Cámara de Diputados, en ocasión del 161 aniversario de la Independencia.

Dijo que en lo que respecta a la política monetaria, “debemos indicar que a la fecha ya hemos logrado eliminar el exceso provocado por la emisión, sin precedentes, de dinero inorgánico realizada por el Banco Central en el 2003, a causa de la crisis bancaria”.

Manifestó que luego de un incremento de un 102 por ciento en el 2003, la emisión monetaria solo aumentó 1.3 por ciento el año pasado.

Explicó que para controlar esta emisión se utilizaron mecanismos de mercado abierto, colocando certificados de emisión del Banco Central a menores tasas de interés y logrando una extensión significativa de los plazos.

Manifestó que los plazos de los valores subastados se extendieron de 7 y 14 días, a más de 360 días en los últimos cuatro meses.

A su vez, agregó Fernández, las tasas de interés se redujeron de un promedio de 56.1 por ciento a 25.5 por ciento.

Anunció también que ya se encuentra en ejecución un programa bien estructurado de capitalización bancaria y que se está trabajando, igualmente, para fortalecer la Junta Monetaria y aumentar la independencia y la capacidad de rendición de cuentas del Banco Central.

Fernández reconoció que el elemento de mayor perturbación en el ámbito de la economía nacional es el déficit cuasi fiscal del Banco Central.

Recordó que el compromiso con el FMI es que ese déficit se reduzca de un nivel de 4 por ciento del Producto Interno Bruto en el 2004, a 3.2 del PIB en el curso de este año.

Dijo que para reducir el déficit, el Banco Central no sólo se ha estado apoyando en instrumentos tradicionales, sino que está empleando una estrategia integral que introduce nuevos elementos para hacer la política monetaria.

En su discurso de ayer, Fernández defendió el reciente acuerdo con el FMI y dijo que el mismo confiere al país la consolidación de la confianza de los agentes económicos, elementos imprescindibles para incrementar los negocios, mejorar el flujo comercial y acceder a mercados internacionales de capitales.

El mandatario recordó que ese acuerdo representa para el país, en los próximos dos años, ingresos por cerca de US$1,000 millones, así como reprogramación o reestructuración de pagos ascendentes a otros US$1,000 millones, con acreedores extranjeros.

Explicó que con el acuerdo, el gobierno se ha comprometido a la aplicación de políticas dirigidas a fortalecer la estabilidad de precios, asegurar la reactivación del crecimiento sostenido, aplicar una política de ajuste fiscal, que ya se hizo, para mejorar las cuentas públicas y reducir las deudas del Estado.

“Otros compromisos obliga a adoptar una estrategia de fortalecimiento del sistema bancario, para establecer una sólida intermediación financiera, fortalecer el Banco Central y la Superintendencia de Bancos, a fin de mejorar la ejecución de la política monetaria y garantizar la estabilidad de un sistema financiero transparente y eficaz”, dijo Fernández.