MOSCÚ. AFP. El Gobierno ruso afirmó ayer que contuvo la progresión de los incendios forestales que, sin embargo, continúan devastando más de 100,000 hectáreas en la parte occidental del país así como pueblos enteros, y que causaron la muerte a 30 personas.
La situación «mejoró sensiblemente» en las últimas horas, afirmó la portavoz del Ministerio de Situaciones de Emergencia en Moscú, Irina Andrianova, a varios medios rusos.
Según ella, la superficie afectada por el fuego se redujo de 7,000 hectáreas, para situarse en 128,000 ha.
«En los últimos dos días, las fuerzas del ministerio lograron evitar que se incendien casas, y evitaron las pérdidas humanas», subrayó esta responsable. Según el último balance oficial del ministerio proporcionado ayer, hasta ahora 28 personas murieron, pero dos cuerpos más fueron encontrados en una localidad de la región de Nijni Novgorod, llevando el total a 30 muertos. No fue posible dar con el ministerio para que precisara informaciones.
Zoom
Los servicios forestales anunciaron ayer la extensión de los incendios al poco poblado extremo oriente del país en las últimas 24 horas, en donde 100,000 hectáreas de taiga y 300,000 ha de llanuras estaban en llamas ayer. Según la portavoz del ministerio, unos 180,000 bomberos luchan contra los incendios forestales.