Gobierno trata activar economía

Gobierno trata activar economía

Las autoridades monetarias arreciaron su agresiva política expansiva encaminada a estimular la economía, inyectando efectivo y estimulando a los bancos a favorecer con sus financiamientos  a los sectores productivos nacionales.

Además de liberar 10,500 millones de pesos, de los 7,500 millones corresponden al encaje legal de los bancos, con lo que reduce su costo de intermediación,  la Junta Monetaria dispuso una nueva reducción de un punto porcentual en las tasas de interés overnight y lombarda.

De acuerdo a lo comunicado por el gobernador del Banco Central, la Junta Monetaria cedió a las presiones de los grupos financieros que venían reclamando revisiones en los regulaciones, especialmente en el de evaluación de activos, que obligaba a calificar los préstamos en función de la capacidad de pago y no en el historial del acreedor.

“En atención a solicitudes de las entidades de intermediación financiera, la Junta Monetaria autorizó a la Superintendencia de Bancos a adoptar medidas transitorias que habían sido demandadas por los agentes económicos y sectores productivos, así como la revisión de algunos aspectos del Reglamento de Evaluación de Activos (REA)”, citó el gobernador Héctor Valdez, quien dio una rueda de prensa rodeado de los principales funcionarios del Banco.

Sectores favorecidos

En su Segunda Resolución del 12 de febrero  la Junta Monetaria autorizó al Banco  Central a considerar para fines de encaje legal los préstamos nuevos que las entidades financieras otorguen a los sectores agropecuario, manufactura local, construcción y micro y pequeña empresas, hasta un monto de 7,500 millones de pesos y hasta 3 mil millones con cargo a los bonos del gobierno previstos en la gastos públicos de 2009

Valdez afirma que las medidas anunciadas  están enmarcadas dentro del Programa Monetario del Banco Central para el 2009, por lo que no alterará la macroeconomía.

Reconoce que con estas medidas se busca “dinamizar la actividad económica y contribuir a la creación y preservación de empleos en el país.”

También que las nuevas disposiciones aceleren la reducción de las tasas de interés en el mercado financiero local y aumente la liquidez en las instituciones financieras.

Las medidas encaminadas a llevar liquidez a la economía y reducir el precio del dinero se adoptan tras diez meses de políticas restrictivas, con las que las autoridades trataron de evitar efectos negativos en la macroeconomía, del choque externo  generado por los altos precios de los insumos y los combustibles, y la crisis económica mundial. 

El alza considerable en las tasas de interés y la reducción del circulante enfrió la economía, afectando a sectores importantes, como el comercio, la industria  y la agropecuaria y las Pymes.

Las claves

1. Factura petrolera

El elvado precio alcanzado por el crudo elevó la factura a 4,241.3, más 31.6 por ciento mayor que la del año 2007.

2. Remesas

Las remesas familiares sumaron durante el pasado año 3,110.7 millones de dólares, para un crecimiento de apenas 2.1%, pero destacable si se toma en cuenta la crisis en los países emisores de las remesas, especialmente Estados Unidos y España.

3. Reservas Líquidas

El Banco afirma que se recuperaron en US$207.5 millones

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Resultados y pronósticos

De acuerdo al Banco Central la economía dominicana cerró el 2008 con resultado más positivos de los esperado. Los datos oficiales preliminares indican que el PIB creció 5.3%. y la tasa de inflación 4.52 %, y sigue mostrando tendencia a la baja, ya que en enero fue de 2.28%.  En cuanto a la Balanza de pagos los resultados fueron menos negativos de lo esperado, ya que el saldo de la cuenta corriente al cierre de 2008 ascendió a US$4,436.8 millones inferior al monto estimado originalmente. “En términos del PIB, el resultado de la cuenta corriente es de 9.7%. Se esperaba que fuera alrededor de 11% “. Un flujo de inversión extranjera de 2,884.7 millones de dólares permitieron financiar el déficit de la cuenta corriente de la Balanza de Pago, sin que se verificaran presiones en el mercado cambiario, y con una devaluación del peso de apenas 3.46 por ciento durante todo el año.

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