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NUEVA YORK, AFP. El representante permanente de Venezuela ante la ONU, Jorge Valero, denunció hoy en las Naciones Unidas que sectores «antidemocráticos y golpistas» de su país buscarán recurrir a la violencia en caso de que el presidente Hugo Chávez gane las elecciones del próximo domingo.
«Denunciamos responsablemente ante la comunidad internacional que sectores nacionales antidemocráticos y golpistas, en alianza con poderosos intereses foráneos, intentarán utilizar la violencia para desconocer la voluntad popular», dijo Valero en la Asamblea General de la ONU, reunida en Nueva York.
«El pueblo venezolano, sin embargo, está preparado para defender, una vez más, sus conquistas democráticas y revolucionarias», advirtió el diplomático, a cargo de la representación de su país en la gran cita anual de Naciones Unidas, en ausencia de Chávez y el canciller Nicolás Maduro.
Chávez, de 58 años y en el poder desde 1999, llega como favorito a los comicios del domingo frente al opositor Henrique Capriles, de 40 años, quien protagonizó una campaña mucho más activa en comparación con la del gobernante y en las últimas semanas ha recortado la brecha entre ambos, según las encuestas.
En su discurso en la ONU, Valero recordó que desde 1999 «se han realizado catorce procesos electorales nacionales» en Venezuela, que cuenta con el «sistema electoral más moderno del mundo», según palabras del expresidente estadounidense Jimmy Carter.
«Serán unas elecciones transparentes y confiables», aseguró, agregando que Venezuela «necesita una oposición democrática». A la advertencia del gobierno venezolano se sumó este mismo lunes la de Cuba, cuyo ministro de Asuntos Exteriores, Bruno Rodríguez, manifestó la «solidaridad» de su país con el presidente Chávez ante «los intentos de desestabilización que se avizoran».
«Las inminentes elecciones en la hermana República Bolivariana de Venezuela serán decisivas para el destino común de la región.
Al pueblo venezolano y a su líder, el Presidente Chávez, expresamos toda nuestra solidaridad ante los intentos de desestabilización que se avizoran», dijo Rodríguez.
«Los poderes que gobiernan en los Estados Unidos cometerían un gravísimo error, de consecuencias impredecibles, si alentaran revertir por la fuerza las conquistas sociales de nuestros pueblos», agregó.
El pasado viernes, el ministro de Asuntos Exteriores de Nicaragua, Samuel Santos, había exigido «respeto a la soberanía e independencia» de Venezuela, que enfrenta «una ola de actos de conspiración para desestabilizar y destruir el proyecto democrático de la revolución boliviariana».
Nicaragua y Cuba forman parte de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA), conformada por iniciativa de Chávez y que está integrada además por Bolivia, Dominica, Ecuador, San Vicente y las Granadinas, y Antigua y Barbuda.
