Aunque muchos lo conocieron por su interpretación en la exitosa obra “Iremos a Verona”, nominada a tres premios Soberano, en la que actuó -y también produjo- Samuel Esteban ha venido trabajando desde hace años como cantante lírico y actor de teatro.

“La vaina”, “Dadidá” y “Las resonancias del quebranto” son parte de las obras en las que ha participado, y como cantante se le suman los recitales “Hispanoamérica en mi voz”, el primero como solista y “Carmina Burana” como barítono invitado.

Este año se embarca en su proyecto más ambicioso, que ve como un reto, ya que será la primera vez que se enfrenta a un concierto como solista ante un público mayor, en el recital “Gracias a la vida” el cual tendrá una sola función: el 17 de agosto a las 8.30 de la noche.

“Gracias a la vida es un canto de agradecimiento, como el nombre mismo lo dice, al hecho de que estamos vivos, de que podemos respirar, de que podemos compartir, de que podemos cantar, de que se puede hacer buen arte en este país”, expresó Esteban.

Pero también es un llamado a la reflexión y al respeto, porque llega “en un momento en que la vida está siendo muy despreciada, muy poco valorada, donde el ser humano siente que tiene potestad para acabar con la vida del otro, uno lo está viendo a nivel mundial, en este país uno lo ve más en el tema de los feminicidios”, explicó el cantante.

El actor, quien ha sido nominado a los Premios Soberano 2016, en el renglón clásico como cantante lírico, y a los Soberano 2015, en el renglón clásico como productor de teatro, explicó que el recital “es un concierto teatro, porque aparte de cantante soy actor; entonces, para mí es muy importante interpretar las canciones, quiero romper con la escena lírica; muchas veces las personas le tienen cierto temor de acercarse, porque creen que no la van a entender o porque se van a aburrir, entonces yo quiero romper con eso”.

En algunos momentos específicos habrá intervenciones de bailarines invitados y también de una actriz invitada especial que por el momento no reveló para no matar la expectativa. También destacó que habrá una orquesta de cámara y juego de luces espectaculares.

La dirección musical estará a cargo de Porfirio Mateo; el guión es de Freddy Ginebra, el guión escénico está a cargo de Ruth Alfonsina, el vestuario es de José Jhan y la coreografía de Marcos Rodríguez.