La semana pasada se anunció que el país había sido escogida por la Confederación Norte, Centroamericana y del Caribe (CONCACAF) para la instalación de un gran centro de alto rendimiento que tendrá un costo aproximado de 30 millones de dólares, o sea, alrededor de mil setecientos millones de pesos. Sin quizás, esta sería la mayor inversión deportiva en el país por una institución extranjera.

De seguro que la ubicación estratégica (en el centro del Caribe), aunque podrían haber sido escogidas otra de las demás Antillas Mayores, fue uno de los factores que incidieron para elegir la República Dominicana, además de las facilidades que ofrece nuestro país tales una gran oferta hotelera, visas fáciles, bajos impuestos y excelentes conexiones aéreas.

Pero también ayudó la apertura que tuvo el país en los dos pasados años de la pandemia para que se celebraran encuentros internacionales entre los miembros de la CONCACAF, ayudando así a esa entidad rectora de la zona a cumplir a cabalidad su calendario.

Contará entre sus facilidades con varias canchas de fútbol, algunas con gradas para albergar partidos internacionales, así como gimnasios, oficinas, hospedaje y todo tipo de áreas. Ahora es esperar que se escoja la sede donde el mismo será construido. Esta decisión, desconozco quien tiene la última palabra, deberá ser bien pensada. De entrada, se piensa que la zona del Cibao Central podría ser la ideal por contar con la mayor y más diversa población futbolística de todo el país, además de que acerca a las demás regiones por contar con buenas obras viales para desplazarse.

El país ha sido premiado por la CONCACAF. Celebrémoslo.