POR JUAN M. RAMIREZ
La República Dominicana padece de un serio desafío de pobreza, desigualdades sociales, deserción escolar y déficit en salud, una  responsabilidad que deben asumir los empresarios, conjuntamente con el Gobierno.

Así lo expresó el doctor Bernardo Kliksberg, asesor principal de la Dirección Regional del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) para América Latina y el Caribe, en la conferencia “Nuevos Desafíos y Desarrollo en el mundo en Responsabilidad Social y Empresarial” auspiciada por los Fondos Europeos para el Desarrollo (ONFED) y el Consejo Nacional de Competitividad (CNC).

Expuso que la responsabilidad social empresarial es el gran tema del siglo XXI, por lo que urge en el país ese sector asuma ese rol junto al Estado.

Señaló que en las naciones desarrolladas hoy se pide ética, no solamente a los líderes políticos sino además a las empresas privadas, a las que se le exige trato digno al personal que maneja, como salarios justos, respecto a la legislación laboral, a la mujer, así como desarrollo profesional.

De igual modo, juego limpio con los consumidores, productos de buena calidad, precios razonables, excelente para la salud y que la empresa se convierta en una protectora del medio ambiente.

De la misma manera que la empresa privada participe activamente de los grandes problemas  del país, ayudando en la aplicación de políticas públicas.

“El país tiene grave problema de educación,  salud, agua potable, alcantarillado”, dijo.