POR ROSARIO TIFA
La moda es así, una fuente de ricas expresiones en la cual intervienen diversos actores que con sus ideas e interpretaciones ficticias o reales marcan las tendencias. Todos toman de sus cristalinas aguas para bienestar de millones de humanos que exigen y están sometidos, en su mayoría, a los cambios que se producen en cada temporada.

 Las producciones, en es sentido, son intensa con todos los rasgos de una moda enriquecida con elementos del pasado y del presente. Esto quedó evidenciado en el desfile Gala a la Belleza, presentado, por primera vez, en República Dominicana por el estilista y crítico en esa área Sixto Nolasco.

Desde piezas sencillas hasta elegantes y glamorosas pasaron por la larga pasarela del suntuoso salón Las Carabelas del hotel Intercontinental V Centenario. Los colores sobresalieron en abundancia, solos o mezclados, pero todos a tono con los conceptos expuestos por un puñado de diseñadores europeos y latinoamericanos.

 Los vuelos en cascadas que pendían de algunas prendas. Los estilos columna y escotes pronunciados, microshort, bañadores, mini vestidos y los suntuosos abrigos invernales de cotizadas pieles desfilaron por la pasarela.

 Los diseñadores extranjeros que exhibieron sus producciones fueron Eulalia Mateo, Juan Carlos Piñera, Rosita Hurtado, Claudia Bertolero, Fely Campo, Lorena Prado, Raquel Tobillo, Yoly Núñez, Carlos Moya y la casa de moda española Anton Moda.

 Participó un grupo de diez modelos entre las cuales figuraban Ruth Ocumárez, Eva Arias y Claudia del Valle.