Pocos minutos después de ocurrir el trágico accidente en la Autopista Juan Pablo II, en Samaná, la tarde del sábado, el señor Juan Aguiar se enteró de la muerte de su hija, su nieta, el esposo de su hija, el padre de este y un vecino.

La infausta noticia se la dio un agente de Amet cuando recibió una llamada de Juan en uno de los teléfonos de las víctimas. El agente de Amet asistía a los accidentados, de los que cuatro murieron al instante y minutos después una menor de edad.

En el accidente también resultaron heridas dos personas. Fue un choque frontal ente una jeepeta y un automóvil a la altura del kilómetro 55 de la Autopista Juan Pablo II o del Nordeste, que comunica a Santo Domingo con Samaná.