El caos sigue predominando en el peaje de la autopista de Las Américas, como consecuencia de la falta de experiencia de los empleados del Ministerio de Obras Publicas para cobrar con rapidez a los vehículos que pasan por el lugar.

A esa situación se añade el hecho de que algunos de los carriles son cerrados por los supervisores, especialmente en horas de mayor flujo de vehículos, provocando taponamientos y protestas por parte de los conductores.

La situación se verifica desde hace una semana, luego de que el cobro del peaje en la autopista de Las Américas, fuera pasado a Obras Publicas por parte de la Concesionaria Dominicana  de Autopistas y carreteras (CODACSA).

Todos los empleados de esa empresa, a quien el Estado cedió el contrato para el cobro del peaje y luego fue rescindido, fueron cancelados tan  pronto fue traspasada a Obras Publicas hace hoy justamente ocho días.

Ayer, día feriado, cuando miles de dominicanos se desplazaban hacia playas, balnearios, hoteles y otros lugares de la zona Este del país, debieron permanecer horas en la autopista por las largas filas de vehículos, antes de llegar al peaje.

La lentitud de los empleados para cambiar a los conductores el dinero que deben depositar para cruzar el arco, es la causa principal del caos, el desorden y protestas de los ocupantes de los diversos tipos de vehículos.

Pero también a esa situación se añade el cierre algunos de los carriles, sobre todo en horas de mayor movimiento vehicular.

Ayer en varias ocasiones se produjeron choques verbales entre conductores y ocupantes de automóviles y empleados de Obras Publicas, por reclamar y algunos desmontarse a quitar los obstáculos colocados en al menos tres carriles.

La razón por la cual el contrato entre el Estado Dominicano y la compañía Codacsa finalizó, es una sentencia de la Corte Internacional de Arbitraje, a donde las autoridades dominicanas llevaron el caso.