El sexteto femenino de Estados Unidos, las doble campeonas del Grand Premio Mundial de Voleibol, iniciaron con buen pie la defensa de su reinado al vencer anoche tres sets por cero a la República Dominicana, ante más de cinco mil personas en el Palacio de Voleibol “Ricardo Arias”.

Estados Unidos se llevó la medalla de oro, las muchachas de Alemania se quedaron con la plata y las dueñas de casa, las de República Dominicana con el bronce del tercer lugar.

Las Norteamericanas terminaron  esta primera ronda preliminar del Grand Prix con tres victorias sin fracasos donde demostraron una clara superioridad ante las rivales que se enfrentaron como fue el caso de China, Taipei, Alemania y las anfitrionas dominicanas.

Ahora el conjunto de Estados Unidos vuela esta semana hacia Brasil donde continuarán su participación en la segunda pata del Grand Prix.

El juego. El conjunto de Estados Unidos utilizó una hora y 24 minutos para vencer a la República Dominicana con parciales de 25-18, 25-19 y 25-15. El ataque ofensivo fue liderado por Destinee Hooker con 17 puntos, seguida de Jordan Larson con 12 puntos.

Nueva vez, la acomodadora y capitana del equipo Lindsey Berg hizo un brillante trabajo poniendo a producir a sus compañeras en cada una de las jugadoras del partido.

El ataque por el centro de la cancha de Destinee y Larson fue mortal por necesidad para la tropa dominicana.

Una contraproducencia. A pesar de que Dominicana perdió su segundo partido al hilo en el Grand Prix, anoche fue su mejor presentación en todos los partidos. Bethania de la Cruz fue la mejor por las criollas con 15 puntos. Ninguna otra atleta pasó de doble dígitos.

A primera hora, el seleccionado de Alemania consiguió su segunda victoria del Grand Prix al derrotar con relativa facilidad tres sets por cero al sexteto de China, Taipei, que terminó la contienda con tres fracasos sin victorias.

Tras concluir el partido de Estados Unidos y la República Dominicana, la NORCECA celebró el acto de premiación de las atletas más destacadas (El Sexteto Estrella) y el nombramiento de la Jugadora Más Valiosa que recayó sobre la jugadora número 19 de Estados Unidos, Destinee Hooker, que también fue la mejor anotadora.